CAPITULO 15 SEBASTIAN

35 5 0
                                    

–Creo que ya tengo todo.

–Si –dice mi madre muy decaída.

–Va a estar todo bien –le aseguro.

– ¿Quién me protegerá ahora? –y se derrumba en mis brazos llorando desconsolada.

–Ya sabes cuál es la solución. Irnos todos juntos y dejarlo.

–Eso no es posible –dice resignada.

–No voy a discutir contigo. Piensa que solo me iré a algunas cuadras más lejos, pero siempre vendré a visitarte.

–Eso espero. Me alegro que estés siendo consiente sobre tu futuro. Pero tengo miedo que te alejes de nosotros.

–Eso nunca sucederá. –y la abrazo más fuerte. –Debo irme antes que venga tu marido. Gracias por cubrirme, mañana recogeré a los chicos para llevarlos a la escuela. –le doy un beso en la mejilla y me voy de esa casa.

No sé si es la mejor decisión que he tomado, ya que nadie los protegerá del alcohólico. Siempre volveré pero nunca será lo mismo.

Estas vacaciones han sido para reflexionar un poco y llegue a la conclusión que yo mismo tenía que hacer algo por mi futuro porque nadie iba a ayudarme. Y para lograr el gran cambio tengo que irme de esa casa.

Luego de tanto tiempo trabajando doble turno puedo hoy en día alquilar un pequeño departamento, pero suficiente para estar al fin tranquilo.

Tenía que resolver otro problema ahora. Sam.

Hace una semana que no nos dirigimos la palabra, tampoco lo he intentado pero hasta acomodar mi cabeza y corazón todo seguirá igual.

...

Viernes en Ácidos, me sorprende la cantidad de personas que hay.

Seguro deben estar todos, menos una persona a la que deseo ver.

– ¡Hola Jota! –dice Clara subiéndose a la barra para besarme.

El asunto con Clara todavía no se ha resuelto. Antes de lastimarla tengo que pensar bien la decisión que voy a tomar para luego no arrepentirme.

–Clara, necesito tu ayuda. ¿Puedes ir a la cocina a ayudarme a hacer el inventario de todo lo que tenemos? Bebida, comida, todo lo que encuentres. –dice Joshua interrumpiendo el beso.

–Claro. ¿Quién más puede rescatarlos? –me guiña un ojo y se va a la cocina.

– ¡Que noche! Este día será memorable –dice John mientras me ayuda en la barra.

–Espero que siga así porque tengo una casa por mantener.

– ¡Cierto! Todavía no has hecho la fiesta de inauguración.

–Y no creo que la haga si quiero permanecer en ese lugar –ambos reímos.

Seguimos atendiendo, la gente no ha parado de tomar y cada vez está más lleno.

Descanso un poco observando a todos lados si veía algún conocido, pero me estoy engañando porque se perfectamente lo que ando buscando.

Y como arte de magia aparece Sam y su mirada se encuentra enseguida con la mía.

Está tan sexi, nunca la había visto vestida de una manera tan sensual. Encima lo acompaña mordiéndose su labio y mirándome fijo, esa mirada que me dice que al fin esta lista para que la haga mía.

–Cúbreme esta noche –le digo a John sin esperar su contestación

Salto de la barra mientras miro como se mezcla entre las personas. La persigo, seguro debe ser alguno de sus juegos.

SUMERGIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora