CAPITULO 20 SAMANTHA

32 4 0
                                    

–Estoy loca –me digo riéndole a mi otro yo que está en el espejo.

Estoy terminando de peinarme y así poder ya bajar a la sala de espera.

Estos tres meses han sido muy duro, en un principio estaba muy enfadada con la decisión de Jota, pero al final entiendo el cambio que hizo en mí el haberme internado en este lugar.

Fue difícil, el tratamiento, el abrirme a una persona desconocida, el estar aislada de lo que sucede afuera, ver a Seba una vez por semana.

Todo fue realmente difícil, pero ahora comprendo que todo se hizo por mi bien. Me siento mejor, ahora estoy en paz.

Ya lista espero a Jota junto a mi doctor. Hablamos de cualquier cosa más allá del tratamiento, pero estaba segura que todavía me está analizando.

Media hora después entra por la puerta principal y su cara de asombro por mi cambio físico y estético es notable. Estoy tan feliz que corro a sus brazos, lo he extrañado tanto.

–Estaba ansiosa por que vinieras.

–Yo también – dice asombrado.

....

–Antes de entrar tengo que advertirte que hice algunos cambios. No muchos para no perturbar tu hogar, pero si para que estemos más cómodos –se nota que Jota está muy nervioso por mi reacción.

–Tranquilo amor, me parece bien un cambio –le digo tranquilizándolo.

Un poco de temor tengo, no quiero que todos los recuerdos de mi padre desaparezcan. Pero al entrar me relajo que el cambio no es tan grande, solo cambió algunos muebles de lugar y algunos fueron reemplazados por nuevos muebles ya que los anteriores estaban rotos. También cambió las cortinas marrones por unas blancas donde entra más luz, las paredes mejor pintadas y combinando diferentes colores, y por último cambió algunos cuadros por portarretratos con fotos de nosotros.

Quise investigar más y voy hacia mi cuarto. Está totalmente renovado. Las paredes tienen de nuevo su color celeste y una cama mucho más grande. Esta limpio con nuevos muebles blancos, y más portarretratos de nosotros. Para ser sincera tengo que admitir que este cambio me ha gustado mucho. Porque al fin y acabo este es nuestro hogar y hay cosas que tengo que dejar atrás.

–Di algo, estas muy callada –dice ansioso.

–Me encanta. Me encanta como quedó nuestro hogar.

Dicho eso, Jota suelta un gran suspiro.

–Sam –dice mientras se acerca y toma mi mano –el único lugar que no he tocado es la pieza de al frente –se ha cual se refiere, la pieza de mis padres –y el despacho de abajo. Lo único que hice fue limpiar un poco.

–Me parece perfecto, juntos vamos a tener que resolver que hacer con esas habitaciones, que utilidad le podemos dar.

Seba me mira sorprendido, su expresión en el rostro se relaja y sin más preámbulos me besa.

–Te amo –dice entre besos.

–Yo también te amo –le digo sin dudar.

Nos besamos por un buen rato hasta que Jota interrumpe el beso.

–Vamos a almorzar ya que nos espera una tarde llena de actividad.

– ¿Que tendrás preparado, Señor?

–Sorpresa, espero que todo salga bien porque lo vengo organizando hace semanas –su preocupación me dio risa.

Juntos bajamos al comedor.

SUMERGIDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora