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Julieta |Viaje exprés y
romance confirmado.

Eran las seis de la mañana cuando estábamos llegando a Córdoba había dormido solamente dos horas y el sueño se estaba haciendo notar devuelta,un hotel se encontraba a unos kilómetros y era el que habíamos visto por internet.
Todo este viaje fue pensado por mi novio y como siempre lo hacía no quería que pague nada.

Me negué en un principio porque no era justo aunque los dos días que estaríamos en el hotel lo había pagado por mi cuenta sin que él se entere porque probablemente no me dejaría.
Julián estaba muy concentrado tratando de buscar la entrada correcta hacia el hotel así que guarde el mate para poder buscar los papeles que guarde en la guantera.

Apenas estacionó el auto en el lugar que nos había indicado el de seguridad bajamos las dos valijas para poder ir a la recepción y pedir por nuestra habitación.
Cuando nos dieron las llaves subimos por el ascensor para dejar las valijas y bajar nuevamente a desayunar como nos habían dicho cuando nos dieron todo.

Veinte minutos pasaron desde que dejamos todo en la habitación y mi novio como es bastante dormilón ya se había acomodado para dormir pero no podíamos,el desayuno nos esperaba y yo me estaba muriendo de hambre.
Después de tanto insistirle bajamos para ir al comedor.

-¡No es justo amor! Yo quería quedarme a dormir.-dice sentándose sin ganas.

-Desayunamos,subimos devuelta y te dormis amor...tengo hambre por eso quise que vengamos a desayunar.-digo sentándome en la silla.

-¡Esta bien! Manejar tanto me agotó.-

-Yo me ofreci para manejar y te negaste mi amor...no quiero quejas ahora.-digo riéndome.

-Vos dormiste dos horas gorda,casi ni hablaste apenas subimos y te dormiste enseguida.-

-¿Estás insinuando de que no querías que te haga compañía mientras manejabas?.-digo haciéndome la enojada.

-No amor...como compañera de viaje sos excelente,pero ni una charla tuvimos mi amor.-dice mirándome fijamente.

-¡Estaba cansada Julián!.-digo casi gritando.

-No te enojes...entiendo tu cansancio mi amor.-dice acercándose para agarrarme una de las manos.

-¡No estoy enojada!.-

-Seguro que si te traigo lo que está en aquella mesa se te pasa el enojo.-dice señalando la mesa en donde habia varias opciones de comida para elegir.

-Si son frutas puede ser que se me pase el enojo.-digo buscando una posición cómoda en la silla.

-No estoy enojada decías y si lo estas...¡Te conozco tanto mi amor!.-dice besándome la frente.

Mientras veia de lejos a mi novio como trataba de elegir algunas de las frutas que había aproveche en llamar a algunos de los mozos que estaban dando vueltas.
Para acompañar la comida había elegido dos cafés con leche,uno muy cargado para mi y otro parecido para Julián.

Mi celular no paraba de vibrar no quería responder los mensajes porque sabía que era mi mamá preguntando si ya habíamos llegado.
Así que cuando los leí por encima bloquee nuevamente el celular,aunque esta vez salio una notificación indicando una llamada por parte de ella.

¿Amigos? | Julián AlvarezWhere stories live. Discover now