Capítulo 27

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Sonriendo, salí de mi última clase y me dirigí hacia la puerta principal atravesando los pasillos de la universidad. Había sido un día muy exhaustivo, los maestros conspiraron en nuestra contra y nos marcaron demasiadas tareas. Algunas entregamos en la misma clase y nos dejaron otras para hacer en nuestras casas; lo cual odiaba porque gracias a Stuart y Mark, mis tiempos de tarea se habían reducido. Definitivamente, el mejor momento del día era cuando el maestro de la última clase nos decía que éramos, literalmente, libres. Mis pasos eran tan ligeros, que podía sentir que estaba volando. Lo primero que quería hacer, era llegar a mi departamento y dormir como un oso en invierno.

Busqué a Jared con la mirada antes de continuar mi camino, pero no lo encontré. Se suponía que nos iríamos juntos. Entonces... eso significaba que tenía que regresar al edificio en tren. Odiaba usar ese transporte.

Comencé a caminar distraída, pensando en el tiempo que me tomaría llegar a mi edificio, la película que vería después de haberme cambiado a una ropa cómoda y la tarde libre que me esperaba. Luego me acordé que un helado de limón me esperaba y levante la mirada, lista para apresurar el paso. Y después lo vi.

-¿Qué estás haciendo aquí? -Pregunté deteniéndome a medio camino al verlo sonriéndome con los ojos abiertos de par en par.

-Vine a robarte, pero no se lo digas a nadie -contestó Alex casualmente y caminé lentamente hacia él-. ¿Por qué me ves de ese modo?

-¿Cómo que por qué? Alex, estas en la puerta de... ¿Cómo llegaste aquí? ¿Dónde está Jared?

-Bien, me descubriste -levantó sus manos en defensa con una enorme sonrisa en su rostro-, venimos por ti, tenemos que ir al estudio. -Antes de protestar, agarró mi bolso y entrelazó su brazo con el mío guiándome hacia la acera de la calle.

Un Bugatti blanco se estacionó frente a nosotros, la ventanilla del piloto bajó lentamente y Jared me dedicó su mejor sonrisa. Alex abrió la puerta trasera y esperó a que me subiera para poder cerrarla. Oh eso era nuevo. Jared esperó que su hermano suba al asiento del copiloto e hizo avanzar el carro con un ronroneo lento. Amaba hacer eso, sí, presumir su automóvil.

-Erick me mandó un mensaje diciéndome que necesitaba ayuda -me dijo Jared viéndome desde el espejo retrovisor.

-¿Dónde estabas?

-Hoy no tuve varias clases, salí hace tres horas -contestó sonriendo descaradamente y Alex giró para hacer lo mismo.

-¿Y qué haré en el estudio? ¿Alex tendrá sesión fotográfica?

-No harás nada, yo estaré en la sala de edición -dijo doblando en una esquina-. Alex no modelará hoy.

-¿Entonces, por qué estamos yendo contigo? -Preguntó Alex acercándose a él, Jared puso su mano en su cara y él retrocedió de inmediato-. Idiota.

-Porque ya vi lo que sucede cuando ustedes dos están solos, así que prefiero no arriesgarme -aún manejando, se tomó la molestia de fulminarnos con la mirada y después centró su vista al camino.

Alex y yo nos mantuvimos en silencio por el resto del camino. Si él no le hubiera robado su fruta, ahora ya estaría en mi departamento descansando. Por un momento odié a Alex y quise tirarlo desde la ventanilla, pero después sacudí mi cabeza y me libré de los malos pensamientos que estaba teniendo. Aunque era tentador...

Bajé la mirada y mi celular me recordó la noche anterior. Hablé con Ed. Sinceramente no me importó el hecho de que sólo lo vi desde una pantalla, no me importó no poder abrazarlo ni darle un beso; yo solo quería verlo y escuchar su voz... Me encantaba escucharlo mencionar mi nombre. Saber que estaba bien y feliz, era lo único que importaba. Ya que él estaba en la habitación de su hotel, pudimos hablar una hora completa sin ser molestados. No Stuart, no Mark. Sólo nosotros dos. Pero hubo un pequeño detalle que me hizo pensar que a Stuart no le iba a gustar. Ed tenía una cerveza en mano; la escondió en el momento que se dio cuenta que la vi y después sus mejillas se tornaron a un color rosa. Traté de ignorar lo que había visto durante el tiempo que hablamos y realmente funcionó, ya que al concentrarme en sus ojos me perdí totalmente en ellos. Y después de todo, siendo sincera... Verlo me hizo extrañarlo más.

Sunburn. [Ed Sheeran]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora