Sunburn. [Ed Sheeran]

Capítulo 29.0

-¡Muchas gracias Melanie! Yo... -elevó sus manos al aire y me cubrió en un enorme abrazo-. No puedo creerlo -sacudió su cabeza y finalmente, después de haber titubeado, agarró el hoodie.

-Perdón por no haberlo traído antes, no había desempacado -me encogí de hombros apenada. Todo había sido culpa de Alex ya que le comentó a Evelyn lo que le había traído de Irlanda. Naturalmente ella se emocionó y comenzó a darme indirectas para que se lo diese enseguida. Sinceramente me había estado sintiendo culpable por olvidar traerle el hoodie cada vez que venía al estudio-. Cuatro días después, pero finalmente lo tienes -sonreí.

-Enserio, gracias Melanie. No puedo creer que lo haya firmado para mí -me abrazó de nuevo y volvió a ver con admiración el hoodie-. Y muchas gracias por el llavero -lo elevó con una sonrisa en su rostro, tenía como adornó la bandera de Irlanda y un trébol de cuatro hojas. Era lindo, pero sabía de antemano que el hoodie le gustó mucho más-. No tienes idea de lo mucho que significa para mí.

-No hay problema, me alegro que te haya gustado. Ed me dijo que le gustaría conocerte -toqué ligeramente su hombro y ella se congeló abriendo desmesuradamente los ojos, sus enormes pestañas hicieron contacto con sus cejas.

-¿Ed me quiere conocer? Oh Dios mío, Melanie -dio un pequeño brinquito y soltó un grito ahogado emocionada. No podía creer que ella realmente a pesar de ser modelo, era una chica sencilla y fan de Ed. Además me sorprendía la amistad que habíamos formado durante el poco tiempo que llevábamos trabajando juntas.

-Evye, Jared dice que vayas a la sala de edición para que veas como quedó la foto -Alex se acercó a nosotros señalando la puerta de la sala y Evelyn bajó la mirada tímidamente.

-Ahora vuelvo -ella me sonrió y vio de reojo a Alex antes de correr a la sala.

-¿Dónde está tu ropa? -Le pregunté a Alex cruzándome de brazos y levantó la mirada. Sus ojos reflejaban inocencia, lo cual no era creíble.

-Acabo de quitarme el traje, estar en bóxers es cómodo -sonrió irónicamente y comenzó a hacer unos extraños movimientos de cadera.

-No aquí por favor -negué con la cabeza poniendo los ojos en blanco y me sonrió satisfactoriamente-. Oh, espera... -pausé frunciendo el ceño al mismo tiempo que enarcaba una ceja- ... ¿Evye?

-Uhm, sí -Alex se encogió de hombros bajando la mirada.

-Los he visto muy juntos últimamente -le susurre haciendo chocar mi codo contra su brazo, él sonrió tímidamente negando con la cabeza.

-No es lo que crees.

-¿Y qué es lo que creo?

-Que entre ella y yo hay... algo -susurró acercándose a mí.

-¿Lo hay? -Pregunte tomando asiento en la alfombra, Alex imitó mis movimientos sentándose junto a mí y suspiró.

Mi pequeño turno laboral ya había terminado, solamente me faltaba guardar la escenografía y colocar las lentes de las cámaras en orden; así que no me importó descansar unos minutos.

-No, pero me gustaría -recostó su cabeza en mi hombro respirando entrecortadamente.

-¿Por qué estas así? ¿No se supone que debes sentirte feliz porque te gusta Evelyn? -Pregunté en un susurro.

-Estoy feliz, pero al mismo tiempo confundido -bajó aún más el volumen de su voz y enseguida noté que su estado emocional cambió rápidamente.

Señor egocéntrico nunca era indeciso, siempre sabía lo que quería... Eso significaba una sola cosa: Alex estaba enamorado.

-¿Confías en mí? -Susurré de nuevo acariciando su cabello y asintió enseguida-. Bien, porque tendrás que decirme la verdad, y recuerda que sé cuando mientes Alexander -palmeé juguetonamente su frente haciendo que riera-. ¿Me dirás?