Moon Boy| Ryden

¿Qué haces Brendon?

Después de el escándalo en el Ice Castle, Brendon volvió a su departamento completamente desanimado, sin querer volver a escuchar otra maldita palabra acerca de Ryan.

No lograba comprender por qué Ryan se quería vengar de lo que hizo, fue hace años y Brendon pudo haber tenido un motivo solo que en ese momento no lo recordaba por sus problemas de amnesia después de su accidente.

Si bien lo que hizo fue algo horrible no existía justificación alguna para que Ryan se quisiera vengar, tal vez le dolió y mucho pero eso había quedado en el pasado, al igual que ellos dos juntos.

Al llegar a su casa Brendon sintió una enorme pesadez sobre sus hombros, algo le inquietaba y sabía que era relacionado con Ryan, siempre era así.

Entró por la puerta principal que se encontraba en la sala, justo donde Dallon estaba mirando la televisión, primero no le presto atención ya que pensó que todo había ido bien es su cita con Ryan, pero luego de mirarlo de reojo noto algo diferente, la sonrisa de Brendon se había desvanecido.

Si bien Brendon no era una persona muy feliz ya que sufría diversos problemas mentales, tampoco era una persona que no mostrara una sonrisa aunque su día fuera completa basura, de inmediato esto alarmó a Dallon, haciéndole saber que algo en él se había quebrado, algo faltaba, otra vez estaba vacío. Brendon subió lo más rápido que pudo a su alcoba para que Dallon no tuviera la oportunidad de entrar tras de él. Justo cuando cerró la puerta Dallon apenas estaba terminando de subir las escaleras, el solo pensó lo peor.

Dallon solo pensó en una cosa, Brendon se iba a suicidar. No sería una noticia que lo intentara ya que lo había intentado varias veces ese año, en cada ocasión Dallon lo detenía. Comenzó a tocar desesperadamente la puerta para que Brendon abriera, al ver que no funcionaba comenzó a patear la puerta, sus esfuerzos eran inútiles.

—¡Esa no es la respuesta Brendon!—grito mientras sus golpes se volvían más fuertes— ¡Ya hemos hablado de esto con el doctor!

Brendon se mantenía adentro de su habitación pero no estaba intentando suicidarse, solo estaba sentado en el suelo, pensando mientras lloraba.

—Por favor Brendon, ¡ábreme!— Dallon sacó su móvil y comenzó a buscar el número de el psicólogo de Brendon— llamare ayuda.

El móvil de Dallon comenzó a sonar, sus manos temblaban por qué se encontraba nervioso de lo que su amigo pudiera hacer tan triste y solo.

—Habla el doctor Patrick Stump, ¿en qué le puedo ayudar?

—Brendon— dijo nervioso— ha vuelto a sus viejos costumbres, otra vez tiene los problemas...— la puerta de Brendon comenzó a abrirse y Dallon colgó.

—Perdón por asustarte Dallon...—al escuchar eso Dallon solo abrazo fuertemente a Brendon.

—Me alegra que no hayas hecho nada tonto—no quería soltarlo y arriesgarse a que su amigo volviera a asustarlo así— ¡ahora dime que demonios te pasa!

Comenzó a explicarle lo que pasó en su trágica cita con Ryan, Dallon no podía creer que Ryan quisiera hacer algo así, sería lo peor para Brendon y más con los problemas que tenía, Dallon sabía que él no podría soportar otro corazón roto des pues de Sarah no podría soportar otro destrozo como ese.

—Me recordó a lo que Sarah hizo, por eso me puse tan mal—mencionó Brendon—sé que fui malo en el pasado pero ya he cambiado, jamás le volvería hacer algo así—bajo la cabeza haciendo notar su tristeza— tal vez estaba equivocado con Ryan.

—El té hace tan feliz—respondió Dallon—deberías darle otra oportunidad, él te la dio a ti— le levantó la cabeza a Brendon con sus manos—  deberías hablar con el, deja que el amor te llene y serás feliz.

—Tal vez tengas razón...

Mientras hablaban escucharon el timbre de la puerta sonar, casi nadie tocaba la puerta a menos de que fuera uno de los vecinos o el portero. Los dos pensaron que debía ser la señora de enseguida para hablar o algo así, Brendon fue a abrir la puerta después de limpiarse las lágrimas de los ojos.

Abrió la puerta y observo quién era, no podía creer lo que sus ojos veían. Vio a Ryan, completamente empapado por la lluvia que había afuera, tenía los ojos hinchados y se le veía cansado, tal vez había estado corriendo.

—¿Qué haces aquí Ryan?

—Cállate— respondió y de inmediato lo abrazo para besarlo.

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me siento tan mal por traerles un capítulo tan corto y que es puro relleno, aun así espero que les guste el capítulo y el video Ryden ahre