Moon Boy| Ryden

¿Podrian callarse?

La gira duraría un mes entero con las tres bandas conviviendo y tocando juntas, serían 13 conciertos en las diferentes ciudades de California. Muy emocionante para todos menos para Brendon, le preocupaba tener que reunirse con las personas que hicieron que dañara a la persona a la que más amaba. Tal vez los chicos habían cambiado pero aún así estaba preocupado acerca de lo que iba a pasar en ese tiempo.

Ryan no podía acompañar a Brendon todo el tiempo ya que no podría pagar los viajes junto a él, prefirió solo asistir a los tres conciertos que harían en Los Ángeles para así verlo, obviamente le llamaría todos lo días y trataría de ir a más de sus conciertos. Pero no le aseguraba estar en todos.

Los chicos de las otras bandas parecían ser muy agradables y también se llevaban muy bien entre todos, Brendon lo intentaba pero no sabía cómo socializar bien con los demás chicos, no era muy bueno charlando. Prefería quedarse callado y reír cuando los demás lo hicieran. Tampoco era que se sintiera muy motivado a hablar ya que últimamente su depresión y ansiedad habían aumentado sin motivo alguno, así que prefería quedarse a un lado antes de afectar a los demás chicos.

Se sentía mal por no hablar pero así era como tenía que llevar las cosas por ahora.

En las noches comenzaba a llorar en silencio ya que no podía dormir, su ansiedad le quitaba el sueño y por más que intentará no podía dormir. Se estaba ahogando poco a poco en un mar de tristeza y nadie podría ayudarle. Aun y le dijera a Dallon o Ryan o a alguien sabía que no sería de ayuda ya que solo haría que se preocuparan y el no quería eso.

—Oye Brendon,—mencionó Dallon al ver que Brendon no hablaba mucho y tampoco se le veía muy animado—¿Estás bien?¿pasa algo?

Brendon ignoró las preguntas de su amigo.

—¿Ryan hizo algo?

—No—respondió fríamente.

—Entonces que te pasa amigo—se acercó para abrazarle—últimamente no te ves muy bien.

—Estoy bien, solo que estar fuera de casa me da estrés—Brendon mintió.

—Me alegra que no sea por Ryan—exclamó en forma de queja—siempre hablas de él y a veces es cansado que hables de el.

Solo respondió con una mirada y una sonrisa.

—Que tal si esta noche duermes en la misma habitación que yo—propuso Dallon—ya sabes para pasarla bien juntos.

—Esta bien.

Su amigo siguió hablando y Brendon solo le contestaba con frases de una palabra, no estaba de ánimo para hablar con nadie, ni siquiera con Dallon. Se sentía muy mal pero no podía hablar con nadie sobre eso. Sentía que nadie entendería de lo que estaba hablando.

De nuevo había un vacío en la mente de Brendon, algo que lo hacía detenerse y pensar por horas, ese vacío que lo hizo un chico tan inseguro e infeliz. No sabía cómo deshacerse de él y era una respuesta que necesitaba en esos momentos, no soportaba estar así. Le era difícil mantenerse bien por tiempo prolongado, pensó que con Ryan podría estar mejor pero no era así, obviamente estar con Ryan le hacía feliz pero como había dicho Patrick, no sería feliz hasta que recordara todo su pasado.

Brendon se fue de la sala donde estaba Dallon, quería descansar un poco para el show de la siguiente noche ya que sería en Los Ángeles y Ryan iría a verlo. Mientras subía por el ascensor de el hotel hacia su habitación entro otro de los chicos que los acompañaba en la gira, el joven Gerard Way. De inmediato Brendon pensó en abandonar el ascensor pero no sería tan cobarde como para hacerlo así que mejor optó por hablar con el.