Amor y perdón.

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30.Amor y perdón.

Ignoro la pregunta de él menor y se dispuso a ver que era lo que él sobre contenía. Se deslizó por el papel un par de boletos de avión, eso solo dejaba más confundido a Ryan.

—¿Qué...—preguntó dudoso, sus manos comenzaron a sudar y sus piernas temblaban temiendo por lo que estaba sucediendo—qué es esto?

—¡Comencemos de nuevo Ryan!—exclamó con euforia mientras tomaba a Ryan por los hombros—solos tu y yo, en otro lugar y con otra vida. Hagámoslo.

El brillo que expresaban los ojos de Brendon era imprescindible, estaba tan extasiado por el saber que podría tener un nuevo comienzo junto a la persona que más amaba. Pero ese brillo fue apagado cuando el chico con vestido azul lo apartó sorpresivamente. Si bien, a Brendon le entusiasmaba su idea, para Ryan fue abrumadora. Tantas cosas recorrían su mente. Sentimientos volvían a él, sentimientos que él siempre quiso oprimir.

Ryan no sabía cómo podían empezar de nuevo, era tan repentino que le daba miedo.

—Yo...—comenzó a tartamudear muestras su voz temblaba al igual que todo el—n...no puedo, Bren... no.

El tiempo, para Brendon, se detuvo en seco; fueron segundos que parecían horas. Claramente no se rendiría, menos por Ryan, el estaba dispuesto a hacer todo lo que estuviera a su alcance solo por el, a pesar de su propio bienestar, por que eso era el amor para Brendon, hacer todo, incluso lo imposible con tal de ver en ese chico una sonrisa.

—Si puedes. Se que te estoy presionando, por eso respondiste de tal manera—sonrió, se acercó al castaño y acarició su mejilla— Ryan te amo y discúlpame si te hago las cosas difíciles pero solo quiero que todo sea mejor para ti. Piénsalo. El vuelo sale mañana, piénsalo esta noche por favor.—retiró su mano de su cara lentamente mientras notaba cada detalle de la hermosa cara de Ryan—Estaré en el bar otra hora por si cambias de opinión.

Salió de la habitación, más tranquilo con si mismo. Confiado en que Ryan lo escogería. Se acercó a la barra y comenzó a beber, pidió una botella de whisky, el más caro de la casa. Tomo trago, tras trago, hasta que todo comenzó a dar vueltas y vueltas.

11:30 y Ryan aún no le decía su respuesta a Brendon, de hecho Brendon no lo había visto desde que salió de la habitación, tal vez por que estaba lleno de alcohol y no podía reconocer gente fácilmente o solo por que en realidad no lo había visto.

La melancolía comenzaba a inundar a Brendon, cosa que combinada con el alcohol no era bueno. Pidió más rondas, un daiquiri, un bourbon, toda clase de tragos el los pidió.

Cuando no podía estar más confundido, sintió a alguien tomándolo de la muñeca y arrastrándolo hacia la puerta trasera de él Valentín. Alejándolo del fuerte ruido de la música, las luces neón desapareciendo poco a poco y el olor a prostituta desapareciendo poco a poco.

Pudo notar que era su queridísimo Ryan.

Al salir Ryan lo puso frente a él, lo miro con ojos tristes tal vez de lastima, su garganta se secaba al intentar decirle a Brendon su respuesta.

—No puedo hacerlo—dijo fríamente.

—Pero bebé—la borrachera que Brendon se puso comenzaba a hacerle efecto, comenzaba a ser poco racional—tu y yo somos lo mejor.

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⏰ Last updated: Jan 22, 2019 ⏰

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Moon Boy| RydenWhere stories live. Discover now