XVI

140 7 0
                                    

PROBLEMAS

CHLOE

terminé con mi valija, salí del cuarto y me dirigí a la sala donde se encontraba Esteban para que me guiara hacia la habitación donde me quedaría por estas semanas.
No veía a Marcus en ningún lado, enserio había desaparecido hasta que la hora se acabase.
El chico junto a mi no dijo ninguna palabra, solo caminamos hacia arriba, al anteúltimo piso y me señaló cuál era la habitación en la cual debía quedarme.
Al entrar, la imagen de un chico pelirrojo se presentó.

—¡Hola! Soy Jackson un gusto. –El estiró su mano en forma de saludo, acepte y le di la mía sonriendo.

—Soy Chloe. –Me presenté. —No quiero incomodarte mucho tiempo solo me quedaré aquí unas cuantas semanas. –respondí. El negó con la cabeza rápidamente.

—No hay ningún problema, puedes quedarte el tiempo que sea necesario... Ahora cuéntame ¿Que tal tu vida fuera de aquí? –Se sentó invitándome a hacer lo mismo.

Estuvimos varias horas conversando y contando cosas de nuestra vida antes de venir a este juego de la muerte. Me cayó muy bien la verdad. Me dijo sobre que sufrió mucho de bullying en la escuela y por eso le daba miedo entrar a la universidad, supongo que fue un trauma muy fuerte, por eso cuando Esteban le habrá nombrado el desafío el entró sin pensar de que podía tratar.
Yo le conté sobre mi mala elección de carrera y de como odiaba estudiarla, le comenté que en realidad quería estudiar escritura y que me fascinaba la idea de inventar historias en mi cabeza,  a Jackson se le hizo una carrera brillante y me sugirió que no esperara más tiempo cuando salgamos y me cambiase.

 
Escuchamos voces de personas bajando por las escaleras y suponíamos que dirigiéndose a la sala, me daba vergüenza ir hasta allá y tener que sentarme cerca de Marcus después de toda la discusión que habíamos tenido. Con Jackson bajamos y los vimos a todos reunidos con su grupo, él ya tenía que ir con sus amigos y a mi me tocaba dirigirme con los míos, que en mi caso serían Marcus y Jane, ya que Rena aún no la encontraba por ningún lado.

—Siempre que quieras puedes venir a nuestra mesa. – Estaba a nada de decirle que si e irme con su grupo, pero no confiaba en nadie allí y por más peleada que esté con Marcus y más que me caiga tan mal esa tipa, confiaba en ellos y sabía que no me harían nada. Me despedí de Jackson y busque la mesa donde ellos se encontraban, Marcus estaba mirando atentamente mis movimientos, no estaba nada feliz.
Me senté cerca de Jane quien en este momento parecía ser mi mejor opción.

—¿Se puede saber quién era ese chico? –Dijo Marcus con tono demandante. Parecía molesto y no sabía bien por qué. Bueno, si sabía, estábamos enojados.

—Mi compañero de habitación ¿Que tal la vida encarcelado por cierto? ¿Tomaste en cuenta lo de salir de aquí o tu hermosa no novia es más importante que eso? –Ironice, el frunció el ceño y no respondió, yo tampoco tenía ganas de pelear pero habían cosas que tenía que soltarlas.

—No confío en ese chico. –Soltó al fin.

—Lastima, porque yo tengo que confiar en el, no tú. – El me miró mal, okey si, no andábamos en las mejores condiciones para conversar y en estos momentos preferiría conocer a los amigos de Jackson.

—¿Por qué están tan enojados? ¿Hay algo que me perdí? –Intervino Jane, su voz me estaba irritado, no dejaba de mirar a Marcus en cuanto hablaba y preguntaba POR LOS DOS... que carajo le sucedía a ella con el.

—Creo que si ninguno te lo contó es porque no es de tu incumbencia y no deberías de meterte donde no te llaman. –Me levanté enfadada y me salí de la sala, ya no tenía hambre, solo quería ir a mi habitación y encerrarme hasta que el almuerzo termine y vuelva Jackson porque no quiero quedarme sola.
Subiendo las escaleras, en uno de los descansos tropecé con alguien que también parecía estar igual de apurado que yo, levanté la mirada para pedir perdón y mi rostro se asombró cuando vio que se trataba de Renata.

—Wow, digo, wow... Siento que no te veo hace semanas chica ¿Por qué tan molesta? ¿Problemas con el amigovio? –Cuestionó. Hice una seña con mi cabeza de que me acompañará, ambas subimos hacia mi habitación y cerramos la puerta con traba. Ya todos nos acostumbramos a hacer eso, daba más seguridad.

—Es que me estresa, Rena. – dije ya encerradas y escupiendo toda mi irá. —Me dice que me quiere, ama y que está enamorado de mi pero luego está todo el maldito día con ella, lo acusan de ser el maldito asesino y le dan la oportunidad de irse, él pudo haber dicho que sí e ir por ayuda pero al contrario decidió quedarse y seguir con esta maldita tortura por razones estúpidas que no podría controlar, luego que me oculta cosas, hay muchisimas que no me cuenta y no va a contarme porque el muy imbécil no tiene los huevos para hacerlo. –Respiré profundamente para calmarme. Ya había dicho todo lo que tenía que decir, ella asentía con la cabeza mientras pensaba como si buscase alguna forma o solución para darme.

—Supongo que hablar con el no es una opción ¿No? –Propuso, claro que no era una opción cuando yo no podía no estar cerca de el sin que esté Jane y no podía evitar ponerme súper mega celosa y querer que me diga por qué tanto maldito cariño hacia ella, sin embargo, esa no era una buena respuesta.

—No creo que sea conveniente. –Dije en su lugar.

—Entonces solo puedo decirte que esperes a que el te hable y trate de blanquear todo. –Sugirió, al parecer era la última opción, escaparme e ignorarlo por siete años no era muy posible que digamos. —Mira Chloe, solo llevamos aquí un maldito mes, piensa que tenemos que mantenernos encerrados por el resto del año hasta que se cumplan los 365 días. No podemos pelear entre los que más confianza tenemos. Traten de solucionarlo, si no, todo puede irse muy a la mierda. - Lo que dijo tenía sentido. No hay mucha gente en quien realmente confiar, y si peleábamos entre los más cercanos todo se saldría de control y el asesino podría ir por uno de nosotros.

—¿Me das un abrazo Rena? –Pedí, casi rogando, tenía los ojos llenos de lágrimas. Maldito sea el día que acepte entrar a esto y maldito momento en el me cruce con Marcus. Ella asintió sin pensar y me dió un abrazo muy cálido, ella era buena amiga aunque nos mantuvimos medias alejadas por un tiempo.

—Si te hace sentir mejor, puedes alejarte un tiempo y venir con mi grupo, te aseguro que son de gran y completa confianza. –Preguntó, yo asentí con una sonrisa mientras mis manos secaban mis ojos llorosos...

JELOUUUUU. . .

aaaa, gracias por las 1k de lecturasss, I am happy, enseriooooo.

Creo que me super mega alegre yo misma de haber vuelvo a escribir a Rena...
La amo JDBSKSBS

buenouuu, si quieren opinar, les dejo espacio, besossss. ♡

[Capitulo editado]

Muertes Placenteras [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now