La Gran Pregunta De La Detestable Reportera

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Tuvimos que sacar a las niñas con mucho cuidado, la prensa nos rodeaba cuando salimos del hotel, la enorme camioneta negra que nos llevó hasta el sitio de la rueda de prensa, el hotel donde Listing se había quedado, llevaba ya colocados los pequeños portabebés donde acostamos a las niñas una vez que pasamos entre el caos de la multitud de reporteros, fotógrafos y aficionados que buscaban su foto con cohete.

- Tal vez cuando lleguemos, yo me quede con las niñas; para que te tomes unas fotos con los fans. – Le dije cuando la camioneta arrancó.

Tom estaba sentado junto a la ventana en el asiente frente al de Danny, ella ya iba dormida a diferencia de Hannah, a quien intentaba calmar con un pequeño masaje en el estómago.

- No, ¡pero qué dices! ¿Crees que te dejaré en medio de este caos con las manos llenas?

Tom ni siquiera lo quería considerar, pero me sentía mal al saber que antes de que llegaran las dos pequeñas Tom siempre se había tomado el tiempo para detenerse cada pocos pasos y concederle una foto o un autógrafo a algún aficionado.

- Siempre puedo pedir la ayuda de alguno de tus amigos de seguridad, ¿no es cierto? – Dije en voz alta, los dos hombres de seguridad que iban al frente de la camioneta respondieron en mi favor. - ¿lo ves? Anda, sé que te gustan los cumplidos que te hacen los fans.

- No es eso... - Me respondió Tom pero a pesar de querer sonar como de mala gana, había una sonrisa muy pequeña dibujada en su rostro.

- Mira, - hice que se volteara en su asiento, - Hannah no puede dormir si no está en mis brazos.

Al indicar aquello, la pequeña se movió para mirarme, ya suponía lo que seguía: que yo la sacara del portabebés y la acomodara suavemente en mis brazos, ella cogió uno de mis dedos con su minúscula manita y bostezó, finalmente sintiéndose preparada para la siesta.

Tom se rio bajito, al alzar la mirada me di cuenta de que estaba observando a Danny, dormida con la boca abierta, luciendo espléndidamente contenta.

- Vaya, me pregunto si es así como nos veía mamá... - Me dijo.

- Que sean gemelas no quiere decir que sean iguales. – Le respondí, sintiendo la ligerísima presión de la mano de Hannah alrededor de mi dedo.

- Créeme, no tienes que decírmelo. – Respondió sonriendo, - es solo que no sabía que las diferencias se hicieran notar tan rápido. – Me dijo.

Nos quedamos en silencio el resto del camino y una vez que llegamos volvimos a hacer el numerito de la entrada frente a las cámaras, por suerte parecía que la mayoría de los reporteros esperaban en la sala de conferencias.

Apenas entramos por la puerta trasera, vi a Emilie hablando con quien suponía era el representante de Listing. Tom me tocó la espalda y dirigió la mirada hacia su representante.

- Ve. – Le dije.

Lo vi apartarse y me quedé con las dos niñas sentadas en un cochecito bastante grande. Un minuto más tarde Emilie se acercó a mí con una enorme sonrisa en el rostro.

- ¡Hola! – Me dijo y se acercó a darme un abrazo. - ¡Ay, muchísimas felicidades! ¡Dos niñas! – Bajó la mirada y vio a las dos pequeñas dormidas. - ¡Me las quiero quedar!

Me reí de su comentario y la expresión que la acompañó, lucía como una loca, pero la sonrisa que le siguió era más bien una sonrisa amistosa y completamente cuerda.

- Hace mucho que no te veía, ¿cómo va todo? – Le pregunté.

- Ah... - suspiró, - bien.

Desde la última vez que hablamos por teléfono me había parecido que estaba rara, no era la única que se había dado cuenta, de hecho a no ser por el comentario de Tom probablemente me habría pasado desapercibido.

Memorias (Tom Kaulitz Fanfiction)Where stories live. Discover now