La Leyenda de las Facciones y del Santuario

Capitulo 32

Los últimos días de descanso terminaron y todos los Demonios de los Clanes Sitri y Gremory estaban listos para ir al Inframundo, acompañados por Seiya y Shoko como sus visitantes, así con Azazel y Penemue. Serafall tuvo que irse antes que el resto por los asuntos de trabajo como Maou. El líder de los Ángeles Caídos se veía extrañamente emocionado por alguna razón, pero Seiya sentía que tenía que ver con él, o con el Santuario, ya que notaba que Azazel lo miraba como si estuviera estudiando a un espécimen, lo cual lo ponía incomodo.

Todos decidieron reunirse en el viejo Edificio del ORC para que todos se fueran juntos. También aprovecharían para explicarles a los nuevos de cada nobleza y a los Caballeros sobre como funciona bien el Inframundo Bíblico.

-Aun no puedo creer que vamos a otro Inframundo...- comento Seiya. No podían culpar su reacción, apenas salió vivo del Inframundo de Hades de milagro y ahora va a otro, pero en circunstancias diferentes, y por lo que ha escuchado de Azazel y los jóvenes Demonios, su Inframundo era totalmente diferente al Inframundo Olímpico. -¿En serio tienen un Sol y una Luna?-.

-Son artificiales, fueron creadas cuando comenzaron a aparecer los Demonios reencarnados e híbridos después de la guerra civil. En el Inframundo no existe un cielo azul; pero si existe el día y la noche debido a que cuando es de día en el mundo humano, el cielo del Inframundo es purpura y cuando es de noche es negro. Y la percepción del tiempo es la misma que en el mundo humano- explico Rias tomando un poco de té. -No es como lo pintan la Biblia o los medios de diversión: el Inframundo Bíblico no es muy diferente a un país humano-.

-Lo que dice Rias es cierto. Muchas construcciones y ciudades de nuestro Inframundo no son tan diferentes a las que se encuentran en el mundo humano, solo que tiene un estilo diferente a lo que un humano estaría acostumbrado y mucho más fino- comento Akeno.

-Aunque lo digan, se me hace difícil la idea...- comento Xenovia, y no podían culparla, al ser una ex-exorcista, de seguro le han dicho puras cosas malas de Demonios y del Inframundo.

-¿Qué tan grande es su Inframundo como para que tengan ciudades?- Pregunto Hyoga.

-El mundo de los Inframundos es tan grande como el planeta, igual que los cielos divinos-.

Ante las palabras de Azazel, Issei, Asia, Xenovia, Seiya, Hyoga y Shoko abrieron los ojos como platos. ¡Eso era absurdamente grande! ¿Cómo era posible eso?

Al ver sus expresiones, Azazel supo exactamente lo que estaban pensando, por lo que era hora de una lección del mundo sobrenatural.

-Para que entiendan mejor, al mundo como una capa. Existen tres grandes capas en total: la capa superior son todos los cielos y reinos divinos de Dioses de todos los Panteones del mundo. La capa inferior son todos los Infiernos de todos los Panteones, y la capa del medio el mundo humano. La capa que representa al mundo humano tiene capas más pequeñas debajo que son los diferentes reinos sobrenaturales del mundo, como el Japón Sobrenatural donde viven los Yokais. La capa superior e inferior son del mismo tamaño que la del medio y en esas capas coexisten todos los reinos mencionados-.

-¡Espera un segundo! Si lo que dices es cierto, eso diría que cada Inframundo coexiste en un mismo mundo, pero por lo que nos dicen sobre el Inframundo de su Panteón y nuestra propia experiencia en el Inframundo reinado por Hades, ambos parecen dos mundos totalmente diferentes- dijo Hyoga.

-Los Inframundos, así como los reinos divinos son como países, se encuentran que se encuentran exactamente ubicados en el país donde rigen su Panteón. Lo que quiero decir es que el Olimpo y el Inframundo Griego se encuentran arriba y abajo respectivamente de toda Grecia, así como el Valhalla y Hellheim en Escandinavia, el Taka no Hama y el Yomi en todo Japón y así con el resto de reinos. En el caso del Inframundo Bíblico, controla el 45% de todo el mundo del Inframundo, siendo el Inframundo más grande de todos los Panteones, con el Inframundo Griego y el Hellheim por detrás-.