Los enviados del Santuario no sabían como reaccionar en este momento.
Frente a ellos, estaba de pie el mismo Dios Odín. No su representante en la Tierra o reencarnado en un cuerpo humano. Sino en su cuerpo de carne y hueso. Seiya y Shun más que nadie podían asegurarlo, porque la presencia y poder que sentían del Dios era la misma que sintieron de Hades cuando lo vieron en su cuerpo verdadero en los Campos Elíseos, pero menos asfixiante y oscura que la del Rey del Inframundo, tal vez porque no estaba viéndolos con desprecio y con intenciones asesinas.
No sabían que hacer exactamente. ¿Debían arrodillarse? Parecía lo apropiado frente a un Dios de gran poder y presencia.
-No es necesario que lo hagan- dijo Odín, adivinando los pensamientos de los humanos. -Puede que sea un Dios, pero no soy al que veneran, y no necesitamos de tantas formalidades, vinimos aquí a ser amigos, ¿no? Por lo que las formalidades sobran-.
Un poco sorprendidos por la actitud calmada y relajada del Dios, los Caballeros dejaron su intento de reverencia para verlo bien.
-Lo lamentamos, Dios Odín, es solo que... no sabemos bien como tratar con otros Dioses... sobre todo con aquellos que no quieren matarnos- dijo Nicole.
-Me lo imagino. Los Olímpicos siempre están deseosos de batallas- dijo Odín. Fijo su vista en Seiya. -Tu eres Pegaso, ¿verdad? Aunque creo que ahora eres Sagitario-.
-S-Si...- dijo Seiya. -Es un honor conocerlo en persona-.
-El honor es mío. Nunca podré agradecerle a Athena, a ti y a tus amigos por lo que hicieron por Asgard y mi representante-.
-No fue nada, además que no hubiera podido lograrlo sin su armadura- despecho el elogió. -Aunque...- miro al Dios de arriba y abajo. -No se parece mucho a la estatua que hay-.
-Seiya...- Nicole miro molesto a su Caballero por ese comentario inapropiado.
-¡Jojojojo!- Pero en vez de sentirse molesto u ofendido, Odín río con ganas. -Lo se, esa estatua fue hecha cuando era más joven, la edad no ha sido tan amable conmigo, ¿verdad?- Se rasco su barba. -¿Pero donde están mis modales?- Miro a sus acompañantes. -Hay que hacer las correctas presentaciones- estiro la mano hacía la mujer. -Ella es Rossweisse, una Valquiria. Ella es mi acompañante y asistente en este tipo de reuniones-.
-Es un gusto conocerlos, Caballeros de Athena- Rossweisse hizo una pequeña reverencia de saludo. -Es un honor por fin conocerlos-.
-¿Una Valquiria de verdad? Increíble...- exclamo asombrado Ban.
-¿Sabes de nosotros?- Pregunto Katya con curiosidad.
Rossweisse asintió. -Si, los Caballeros de Athena son muy populares entre las Valquirias, aun más después de su batalla con los Dioses Guerreros hace años. Es un gran placer finalmente conocerlos- dijo, con una pequeña sonrisa de emoción.
Odín estiro la mano hacía Bud. -Y creo que ya conocen a mi guardaespaldas-.
-¡Bud!- Shun fue el primero en reconocer al Dios Guerrero, alegrándose mucho de verlo.
-Es un gusto volverte a ver Andrómeda. No, ahora eres Virgo, ¿verdad? No me sorprende. Alguien de tu fuerza sin duda esta entre la élite del Santuario- dijo Bud.
Bud de Alcor Zeta fue uno de los Dioses Guerreros que Seiya y sus amigos lucharon hace años. Es el hermano gemelo de Syd de Mizar. En Asgard, tener gemelos es señal de mala fortuna para la familia, y para evitar una desgracia, Bud fue el gemelo abandonado en los fríos bosques, pero rescatado por un leñador y criado como su hijo, hasta que el destino lo hizo reencontrarse con su hermano gemelo de niños, reconociéndolo por una daga igual a la que tenía, y que era lo único que relacionaba a la familia de la cual desconocía hasta ese momento.
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La Leyenda de las Facciones y del Santuario
ParanormalAthena, después de siglos desde que existe, ha decidido expandirse y formar alianzas con el resto de seres, incluyendo las tres facciones. Una nueva leyenda comenzará, y Seiya alzara el vuelo con sus alas doradas para ser la flecha que muestre la lu...