𖤐 Capítulo 06

2.2K 304 9
                                    

Edward y sus nuevos amigos

•••••••••••••••••••○○●○○••••••••••••••••••••

Edward los siguió por varios callejones corriendo, estaba preocupado por ellos, la capital parecía tan grande y rica, pero claramente era solo una fachada.

Miró detrás de él para cerciorarse de que nadie lo estaba siguiendo y se sintió aliviado que no lo hicieran, giró hacia la derecha tal y como los otros niños lo acababan de hacer, entonces freno a tiempo.

Ellos se habían detenido en la calle que estaba sucia y hedionda, las casas a su alrededor estaban destartaladas, muchos niños estaban afuera con la piel pegada a los huesos, los niños que habían salido a robar eran los que parecían ser los más saludables y eso que su apariencia era un desastre.

— Willy, alguien nos ha seguido — uno de los más pequeños que jadeaba lo señaló tembloroso.

Willy el que parecía ser el mayor lo miró con aprensión, colocó a los más pequeños detrás de él y se aseguró de plantarle cara a su perseguidor.

Edward alzó las manos para tranquilizarlo les mostró con su acción las dos bolsas llenas de pan. — No vengo a causar problemas — aseguró — he visto que tienen hambre — los miró a todos.

Willy frunció el ceño y trago saliva, el gruñido de su estómago resonó en la calle. Otros gruñidos se le unieron en coro debido al rico aroma del pan.

— ¿Qué quieres a cambio? — preguntó con temor.

No era la primera vez que conocía a alguien bien vestido que ofrecía comida Willy nunca la había agarrado por miedo ya que los pocos niños que lo habían hecho fueron llevados a la casa de ese hombre rico y ahí les hacían cosas abominables, él tenía trece años y el mundo que conoce esta repleto de maldad, los nobles tenían gusto por los niños y los usaban como si fueran mujeres, cuando uno se resistía era asesinado y así se repetía el ciclo.

Edward ladeo la cabeza confundido por lo que el niño decía, estaba preocupado por ellos, le habían recordado a sus amigos en el pueblo. — No quiero nada — se encogió de hombros —, pero si tienen mucha hambre puedo darles más — miró a los niños que estaban tirados en la calle.

— No te acerques a ellos — el niño que lo había señalado antes lo detuvo — ellos tienen dueño — susurró.

Edward lo miró confundido — ¿dueño?

El niño asintió.

— Geo, no deberías decir nada — Willy lo regaño.

El ahora llamado Geo miró mal al mayor — nos está dando pan — reclamo y tomó una pieza de pan que Edward le dio en ese momento, se la dio a uno de los más pequeños y extendió la mano.

Edward se rio, el pequeño Geo era descarado, le recordó a su hermana.
— ¿Es peligroso hablar aquí? — Edward preguntó mientras seguía dándoles pan

Willy miró a su alrededor y luego asintió. Ningún lugar en Lorka era seguro, menos para un niño rico como el que tenía de frente, era mejor que lo sacaran de ese lugar, parecía un buen tipo y no daba la escalofriante sensación qué los otros tipos tenían.

Edward pensó que bien podía llevarlos a su casa, la casa era enorme de tres pisos con un jardín interior enorme y uno pequeño exterior, había un sótano y un ático, el sótano era el refugió de las damas, en cambio el ático era el suyo.

Debido a los tres pisos que había en la casa su padre tenía su estudio y la biblioteca era grande y habían una sola habitación extras que estaba vacía, el pensó que bien podrían acomodarse.

¡Ꭺ ꮮꭺ ꮇꮖꭼꭱꭰꭺ ꮮꭺ ꭲꭱꭺꮇꭺ!Where stories live. Discover now