YO SOY EL PADRE DEL VILLANO PARTE 2

Capitulo 278 : Extra

Lin Luoqing y Ji Yuxiao se tomaron un descanso de dos días. Entonces finalmente llegó el momento de grabar 'Vamos a enamorarnos juntos'.

Los dos habían hecho las maletas el día antes de la grabación y les explicaron a Lin Fei y Ji Leyu que iban a salir a trabajar. —Volveremos en tres días.

Lin Fei asintió.

Ji Leyu tomó la mano de Lin Luoqing y le preguntó: —¿No puedes traernos contigo?

—Por supuesto que no. Ustedes dos todavía tienen que ir a la escuela.

—Entonces, ¿puedes llevarnos cuando no tengamos escuela?

—Espere hasta la oportunidad adecuada más tarde—, dijo cálidamente Lin Luoqing.

—Bueno.— Ji Leyu parpadeó lastimosamente. Parecía como si quisiera que lo empacaran y se lo llevaran juntos.

Ji Yuxiao se divirtió con sus acciones y se frotó la cabeza para consolarlo.—Primero estudias mucho. Entonces tu papá definitivamente te llevará a trabajar en el futuro.

Después de eso, no se olvidó de educar a Ji Leyu.—Cuando tu papá y yo estamos fuera, tienes que escuchar obedientemente a tu hermano, ¿entiendes?

—Entiendo— respondió Ji Leyu obedientemente.

—Eso es bueno.— Ji Yuxiao se rascó la nariz.

—Entonces, si tienes algo, llámanos a mí y a tu papá. Si no respondemos y tienes prisa, llama al tío Wu, ¿sabes?

—Sí.

Lin Luoqing le pellizcó la cara.—Cuando llegue el momento, papá te traerá un regalo cuando regrese.

—Sí—, respondió Lin Fei con calma.

Lin Luoqing lo besó a él y a Ji Leyu uno por uno. Luego regresó a su habitación con Ji Yuxiao para descansar.

Temprano a la mañana siguiente, la alarma despertó a Lin Luoqing.

Fue antes de la hora acordada con el grupo del programa. Lin Luoqing y Ji Yuxiao primero enviaron a los dos niños al auto de Xiao Li. Luego se despidieron y volvieron a desayunar y cambiarse de ropa.

Una vez que terminaron de cambiarse de ropa, llegó el equipo del programa. Las dos partes se reunieron con éxito. Lin Luoqing y Ji Yuxiao subieron al auto del grupo del programa y se dirigieron al aeropuerto.

Al final, después de todo, se había despertado temprano. Lin Luoqing se sentó en el auto y siguió bostezando. Ji Yuxiao vio esto y lo abrazó. Luego presionó la cabeza de Lin Luoqing contra su hombro y lo persuadió: —Deberías dormir un rato.

A Lin Luoqing le daba vergüenza apoyarse en él así frente a un automóvil lleno de personas. Podría fingir que no tiene sueño. —Está bien. Estaré bien en un tiempo.

Una vez que terminó de hablar, giró la cabeza para mirar por la ventana y se obligó a desviar su atención. Luego, después de no mirar por un rato, no pudo soportar la somnolencia y se quedó dormido contra la ventana.

Llegó la luz roja. El conductor pisó el freno y Lin Luoqing abrió los ojos confundido, un poco aturdido.

Ji Yuxiao lo abrazó a su lado. —Tu duermes. Está bien.

Lin Luoqing aún no estaba despierto y asintió aturdido. Naturalmente, extendió la mano para abrazar a Ji Yuxiao y se apoyó en su hombro.

Al ver esto, el personal del programa, que ya se había unido a la Asociación de Apoyo del JiQing, instantáneamente gritó como gallinas en sus corazones.