Akudokai

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Hayate:

El sol poco a poco lastimaba mis ojos, escuchaba cómo los demás ya estaban despertando y comenzando a levantarse.

Al abrir los ojos veo el rostro de Saku un poco sorprendido porque no somos producto de su imaginación, anoche no fue un sueño y realmente pudimos convivir todos tratando de ser un poco más amigos.

Satsuki le sonríe a su amigo, y Akane se levanta con mucha energía para pedirnos un favor. -Sólo pónganse el uniforme, quiero arreglarlos. -Se ve emocionado aún con sus ojos adormilados.

-¿Para qué? -Pregunto confundido mientras él de sus cosas sacaba un cepillo y comenzaba a cepillar su cabello morado de una manera muy suave y delicada.

-Para que se vean bonitos, ¿hay algún problema con eso? -Nos ve a cada uno de nosotros para saber si alguien se negará.

-Yo quiero ser el primero. -Se ofrece Saku mientras camina hacia Akane para que comience a peinar su cabello.

Resalta sus labios con un color rojo, sus ojos llaman más la atención con la sombra oscura que puso al rededor de ellos, y el volumen de su cabello había quedado muy llamativo, todo gracias a las pequeñas manos del chico popular. El rubio presuroso se fue a la cocina, y con una mirada convincente Akane logró que me acercara a él para que comience a arreglarme a mi. No hizo mucho, trenzó mi cabello por un lado y colocó un poco de sombra en mis ojos, no estaba acostumbrado a cómo me veía, sin embargo, no me desagrada del todo.

Al terminar conmigo, curioso fui a ver qué hacía Saku en la cocina, al llegar me encuentro con que el chico se encontraba preparando platos de... Cereal.

Sonreí muy poco al notar aquel gesto tan tierno, y sin decir nada me acerqué a ayudarlo un poco, colocando la cantidad exacta de cereal para cada plato, todos por igual, todo simétrico. Saku se acerca al refrigerador para sacar un bote de leche que deja al centro de la mesa, pero al realizar aquella acción noto que sus muñecas se encuentran vendadas.

Con un poco de inquietud lanzo una pregunta bastante directa. -¿Cuándo fue la última vez que quisiste terminar con tu vida? -Lo veo a los ojos y él me evade, como si no hubiera escuchado nada, simplemente baja las mangas de su uniforme para que nada esté descubierto. -No le diré a nadie, no tengo a quién. -Insistí.

Se queda unos segundos pensativo con la vista fija hacia uno de los platos llenos de cereal, hasta que habla. -Ayer por la tarde y anteriormente, un día antes de encontrar el cuerpo de Aki. -Levanta la mirada y hace contacto visual conmigo. -Cuando eso sucede, suelo pedirle a Satsuki que venga a dormir conmigo para impedir que lo haga de nuevo en la madrugada. -Su expresión es seria, pero por dentro seguramente se siente frustrado.

-Se que llevas muchos años lidiando con eso, siempre lo noté en tu actitud y la manera en que rascas las cicatrices de tus muñecas. -Digo con sinceridad, mientras tomo el bote de leche y comienzo a verterla sobre uno de los platos, hasta llegar a la cantidad deseada. -Y creo que ahora tienes otras 3 razones, aparte de Satsuki, para evitar autolesionarte. -Cierro el bote y lo dejo nuevamente en el centro, con calma me siento a comer cereal y él se queda un poco pensativo.

Lentamente los demás chicos llegaron a la mesa; el cabello rojo de Satsuki resaltaba con el delineado de sus ojos, la mirada seria de Zero era más penetrante con la sombra oscura en sus párpados, y el rostro de Akane deslumbrada entre su cabello morado en el que se hizo dos coletas.

-Que feliz estoy, lucimos como una banda. -Akane sonreía orgulloso de lo bien que había quedado su trabajo. Yo no diría que parecemos una banda, yo diría que sólo nos van a ver extraño por las calles, pero no quería desvanecer la sonrisa del chico que puso su esfuerzo en arreglar un poco el desastre de personas que somos.

ゴシップ (Gossip)Where stories live. Discover now