ゴシップ (Gossip)

Kanashimi to Sousaku

Saku:

Con el cabello recién teñido caminábamos desorientados por el patio, el sol se posaba fuertemente en nuestras pieles calentando nuestros cuerpos, pero no nuestra alma.

-¿Dónde estará el chico de ayer? -Pregunta Satsuki intentando acomodar los mechones de su cabello, se le nota incómodo con ese color, Zero parece no importarle y Akane encontró la manera de verse bonito.

Paseo mi vista por todos lados intentando encontrarlo entre tanta gente que nos ve extraño, como si no quisieran que estemos en este lugar. Casi me doy por vencido hasta que veo al chico caminar, no lleva cubrebocas y deja a la vista una perforación debajo de su labio inferior.

-Oye, detente. -Llamo su atención de una manera estúpida, él voltea de inmediato y nos ve extrañado. -¿Ya nos explicarás qué sucede aquí? -Me acerco a él con cierta determinación, él no cambia su expresión.

-¿Disculpa? -Nos ve uno por uno, pero parece no reconocernos.

-Por la madrugada nos dijiste que nos explicarías qué haces aquí. -Menciona Akane cepillando su cabello con sus dedos, que terminan por ponerse negros por el tinte que se cae aún.

-Yo no dije nada. -Niega con la cabeza bastante confundido, a la vez que detrás de nosotros escuchamos una risa que nos exalta a todos y con miedo hace que volteemos rápidamente, era el mismo chico, pero ahora con mascarilla negra.

-Encontraron a mi gemelo, su nombre es Kuro. -Tiene una sonrisa en su rostro, se abre paso entre nosotros para posarse al lado del otro chico. -Mi nombre es Yohan. -Se presenta con una sonrisa maliciosa, su gemelo también sonríe al ver la jugada que nos hizo el chico del cubrebocas.

-Eres malvado, no noté cuando te levantaste en la madrugada. -Dice Kuro con una sonrisa.

-Me desperté porque Mei no podía dormir. -Se encoge de brazos el contrario, a la vez que suena una campana como si fuera hora de clases. -Es hora de ir al comedor, les contaré todo ahí. -Dice y nos hace una seña para que lo sigamos.

~

Era una amplia mesa, de un lado nos encontrábamos los cuatro, y del otro lado Yohan, Kuro, un chico con crayones en sus manos, el chico rubio con el rosario y al lado de él, un chico de cabello morado, casi azul con rostro afeminado.

La comida, servida en una bandeja de plástico lucía asquerosa, junto con los palillos en mal estado y de baja calidad; se me revolvió el estómago de sólo verlo, Satsuki poco a poco probó el arroz, Akane revolvía el curry con desgano, Zero hizo a un lado el plato y yo me conformé con el yogurt que dejaron. Los chicos de enfrente no se molestaron en comenzar a comer con total normalidad.

-Después te acostumbrarás. -Yohan le menciona a Zero después de ver que no comerá nada.

-Cuando llegamos aquí yo no paraba de vomitar la comida. -Dice Kuro con la boca llena.

-Entonces, ¿cómo llegaron aquí? -Pregunta Akane para retomar el tema, comienza poco a poco a comer.

-Que les cuente Mei, con él inició todo. -Yohan señala al chico con crayolas.

Mei nos vió a detalle a cada uno de nosotros mientras jugaba con su blanco cabello, maltratado y hecho un desorden a pesar de tener pequeñas coletas en él. Al lado de su comida había un pequeño libro para colorear, de flores, y él ya llevaba la mitad de un lirio; guarda sus cosas en su pequeña mochila que había colocado al lado de él, pero saca un mechero que comienza a encender y apagar cual artefacto anti-estrés.