ReaLove ©

Capítulo 13

Me tiro en el sofá y Aj viene corriendo a mi búsqueda. Una sonrisa involuntaria se planta en mi rostro cuando siento los mimos de mi pequeño que ya no es tan pequeño. Acaricio sus orejas y de forma automática cae rendido a mi lado. Aj me infunde todo lo que necesito sin hacer ningún tipo de esfuerzo y jamás voy a saber cómo logra eso con exactitud.

—¿Una copa de vino?

Levanto la cabeza, justo cuando veo a Garrett acercarse a mí. Ambos nos vinimos juntos del trabajo porque, a pesar de lo que Zac me dijo, necesito la versión de mi amigo también.

—Son las cuatro de la tarde —refuto recostándome de nuevo en el sofá.

—Pensé que te vendría bien. —Me guiña un ojo con complicidad.

—Aún sigo molesta contigo. —Garrett voltea los ojos.

—¡Oh, vamos! Me enteré de la enfermedad de la zorra ayer. No me diste tiempo y cuando vi a Zac en LI, le di un ultimátum porque yo no puedo tener secretos contigo.

Un suspiro involuntario abandona mi cuerpo cuando vuelvo atrás en mi día, específicamente a nuestro almuerzo y más aún, al beso que compartimos. ¿Por qué no puedo dejarlo de una vez? Siento la maldita necesidad de irme a una isla desierta y olvidarme de todo a lo que hombres se refiere, pero incluso en esa situación, ese patán sabría enloquecer mis sentimientos.

—Nos besamos.

—¿Qué? —exclama con un tono más agudo de lo normal.

Garrett me lleva al siguiente nivel y no puedo evitar reírme ante sus reacciones cuando le cuento cada detalle de nuestro dichoso encuentro. Es imposible esconder cualquier tipo de detalle, por lo que también le digo de mis planes con Trent para mañana.

—Bien, vamos por partes. —Sonrío—. ¿Aceptaste salir con Trent frente a Zac y después aceptaste el beso candente de Zac?

Otra carcajada me sacude y esta vez mi amigo se ríe libremente conmigo. Estos pequeños momentos de felicidad plena que me da una simple risa, son todo lo que necesito sin darme cuenta siquiera de eso. Mi alma se siente orgullosa de recibir el calor del amor que tengo a mi alrededor, espero poder darle esta sensación siempre.

—Bueno… —digo cuando por fin controlo los espasmos de mi cuerpo—. En realidad, no tengo ningún interés en conocer a Trent de la forma que él espera.

—Porque amas a Zac —termina él y sin ánimos de contestar, asiento—. Bien, como tu increíble y súper sexy mejor amigo, me corresponde decirte que esto no va nada bien.

—Lo de súper sexy está un poco de más, ¿no crees? Por ahora no quiero pensar en todo eso, sé bien que no debo darle alas a Trent y que debo pensar si vale la pena volver a intentarlo con Zac. No quiero decidir todo ahora —musito con cansancio.

—Tengo una buena forma de distraerte. —Su sonrisa crece a medida que mi ceño se frunce—. Iré a un juego de béisbol con Jeremy.

Mi boca de seguro está tocando el suelo en este instante. La mirada satisfacción de Garrett me llena de alegría porque a pesar de las muchas salidas casuales que me ha comentado, nada le gana a lo que está sintiendo por Jeremy y su felicidad es la mía.

—Garrett es increíble. —Lo abrazo y vuelvo atrás en lo que dijo—. Espera, a ti no te gusta el béisbol.

—¿Puedes creer que a él sí? Incluso los hombres perfectos tienen imperfecciones. —Vuelvo a reírme con ganas—. Tú sabes de ese deporte aburrido así que tengo tres días para convertirme en experto y poder gritar cuando metan un Strike ganador, ¿no?