XVI - Juego del destino Parte II

37 17 29
                                    

~Cuatro días antes~

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

~Cuatro días antes~

Lea reacciona después de haber sido golpeada por el rayo rojo, no puede moverse, sus fuerzas se van poco a poco, a lo lejos escucha voces, alguien la toca y ella se trata de defender, pero su cuerpo no le sigue el ritmo, logra identificar una de las voces y lo confirman sus ojos, es Iris, que la induce a calmarse con su voz, ella solo observa como la joven tiembla y con cuidado la toma en sus brazos mientras discute con alguien, para luego perder la conciencia.

Cuando reacciona de nuevo, ya no se siente tan débil y puede moverse, estaba segura de haber sido herida, pero ahora estaba casi cerrada en su totalidad; cuando analiza un poco su entorno, se percata de que Iris está ahí y su amigo parecía inconsciente; como no puede darse el lujo de ser atrapada, Lea huye de ahí antes que cualquier otra cosa pase.

Vuela bajo por un gran tramo, burlando varias zonas de seguridad que ya tenía identificadas hasta salir del territorio del clan Rubí, se dirige a una cueva oculta entre la maleza y al entrar se posa en el hombro de Sappheiros, pero subestima las fuerzas que tiene y la presión que ejerció en su cuerpo todavía herido y cae.

-¡¿Lea?! -grita Sappheiros mientras la atrapa en sus manos.

El ave no pierde la conciencia, pero su amigo alterado la revisa y detecta la herida.

-¿Quien fue? ¡Maldición, lo pagará! -dice con gran desesperación y enojo-, la detectaron, esto fue mi culpa... -piensa una y otra vez-, traigan vendajes y demás, la curación que necesita no es grande, me encargaré -ordena a dos de sus secuaces.

Pero había algo extraño, Sappheiros podía detectar rastros de magia utilizada recientemente en ella, la herida proviene de una fuente distinta, definitivamente la curaron.

Los secuaces pronto regresan con el material de curación y lo dejan al alcance de su señor para que pueda disponer de ellos.

-Me sorprende que alguien te ayudara -le dice al ave mientras se mueve diligentemente para curarla- pudieron pensar que hirieron a un ave normal por error... no, imposible, este tipo de aves son poco comunes en Lápide, además eres muy sigilosa por ello te confié esta misión, tuvo que ser alguien con grandes habilidades el que te detectó e hirió y alguien que te reconociera quién te curó, acaso fueron... pero ¿por qué?

Cuando termina de atenderla suelta un suspiro de alivio y le dice que es mejor que descanse hasta recuperar sus fuerzas; Lea se limita a cerrar los ojos; Sappheiros no se separa de ella, la alimenta y la cuida celosamente.

Pasan tres días y aunque todavía está vendada, Lea ya puede moverse y volar un poco.

-Será mejor que no te sobreexijas -advierte.

El ave se posa en el brazo derecho que Sappheiros le extiende.

-No tienes que preocuparte, gracias a ti ya estoy mejor, solo es incomodo volar con el vendaje -Responde Lea con una voz suave y delicada.
-Sabes perfectamente que fuiste curada por alguien más, cuando llegaste aquí ya solo tenias heridas menores, sin duda algo te derribo, estabas muy debil asi que no te forcé a decirme nada, pero no lo ocultes más...
-Creo que ya lo sospechas, no necesitas que lo diga... ademas eso no importa ahora, debo darte mi reporte... -contesta con un tono serio.
-... -Sappheiros muestra una expresión de descontento pero decide no presionar el asunto. No entiendo porqué ocultar esa información -piensa.
-Fue muy complicado acercarme sin ser detectada, pero pude escuchar y averiguar algunas cosas... la muchacha se llama Iris, es de origen desconocido, el objetivo de su viaje era encontrarse con el regente del clan Rubí, como sabes ahí, no puedo seguirlos, pero antes hablaban de portales y otro mundo... al parecer ella viene de ahí, es muy extraño, jamás había escuchado sobre algo así.

AngelineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora