XLV - Conexión II

4 0 0
                                    

—Esa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Esa... era... mucho más joven pero sin duda... mi madre, yo era ese pequeño intentando caminar, el otro era... ¿Sa...ppheiros? ¡¿de quién son esos recuerdos?! —expresa alterado.

—Si lo que he estado sintiendo es lo que creo, son recuerdos de mi mamá —responde jadeando leve.

—Pero... ¿cómo es posible?

—Te lo dije, hay una conexión entre nosotros.

—Tu mamá era la conexión ¿por qué ahora y contigo? aunque seas su hija es demasiado difícil de creer.

—Porque creo que en ese entonces ella ya estaba embarazada de mi, tú de algún modo lo sabias por eso la abrazaste así. Acabas de decir que la sangre de angelus puede detectarse entre sí, pero parece que eras muy perceptivo en ese entonces.

—Entonces las dos voluntades de las que hablaste, ¿una es de ella?

—Sappheiros dijo que a él siempre lo trató como si fuera su hijo al igual que tu mamá, eso explica todas las reacciones que no comprendía de mi misma, ella estaba tratando de salvar a Sappheiros y la familiaridad venia de todos, en otras palabras ese es mi motivo para quedarme.

—¿Ella de verdad quiere arriesgarte asi?

—Creo que es un remanente de su alma que se quedó conmigo para cuidarme, pero también está el pendiente que no pudo dejar ir. Ahora con mi poder liberado la conexión es tan fuerte que cuando tomé la mano de Sappheiros en la montaña, él también tuvo una visión, pero a diferencia tuya, eran parte de sus recuerdos así que no le tomó tan desprevenido pero si sintió mucho dolor, yo no vi nada pero percibí todos sus sentimientos en ese momento. Al principio pensé que fue un sueño pero con esto puedo saber que no fue eso.

—Antes noté que lo llamaste solo por su nombre ¿fue también por ella?

—Ah... mmm... no, él dijo que con los otros era informal y con él no... me lo pidió y bueno intento acostumbrarme... —dice muy nerviosa como si sintiera que tiene que dar explicación.

El muchacho suelta una leve sonrisa y suspira.

—Es curioso, antes eso me molestó pero en retrospectiva fue estupido de mi parte, tus sentimientos son honestos, es obvio que quieres acercarte a todos ellos... aunque sigo sin entender cómo llegaste a ese deseo ¿crees que es solo debido a tu mamá?

—No se como podría diferenciar...

—Sencillo... compara las situaciones que has vivido con ellos y las que viviste antes con mi gente y yo. Te comportaste diferente ¿cierto? tenías menos confianza en ti misma y desconfiaste de la gente a tu alrededor, en contraste a ellos los miraste y enfrentaste... eres incluso más segura y brava.

—Si... pero solo en parte. Realmente tuve mucho miedo, pero por momentos es como sino pudiera evitar hacer o decir cosas que no van con mi personalidad.

AngelineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora