Sinopsis:
Tras la muerte de su madre, Iris vive en cautiverio desde los 5 años, pues su padre la mantiene encerrada en casa con estrictas reglas para protegerla.
Su vida da un giro inesperado ya que por un suceso extraño llega a otro mundo, uno lle...
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Después de varias dificultades, algunos del grupo bajan la montaña para el medio día. Decidieron que Sappheiros baje a Iris volando, sin embargo a Larimar se le ocurrió algo más.
—Tu también tienes alas, ¿por qué no intentas usarlas? —propone a la joven.
—No estamos para experimentos Larimar —interviene Zircon.
—Se trata de práctica, ¡vamos! muéstrale hermano; eres uno de los mejores en el tema —dice emocionado, dándole una palmada en el hombro.
Zircon lo fulmina con la mirada, pero rápidamente cambia de expresión debido a que la joven está al lado de su hermano y parece suplicarle con los ojos, pues brillan con otro tipo de intención, la de aprender. Por un momento intenta replicar, pensando en que ella iba hacia su muerte, ¿para qué le serviría aprender más cosas? quizá solo lo imagina y se está dejando llevar por Larimar, pero sentía un extraño deseo por cumplir algunos caprichos. A su manera de verlo, sus vidas también se extinguirían pronto y quería al menos dejar una huella no tan mala.
—Está bien —dice resignado.
Larimar hace una seña de victoria con la mano e Iris se emociona tanto que sonríe, dejando atónitos a los dos y algunos que todavía estaban ahí, incluido Sappheiros, pero éste retira pronto la mirada y continúa preparándose para bajar.
—Primero debes aprender a sacarlas, la vez anterior fue por una abrupta expulsión de poder, esta vez intenta enfocar tu magia en ellas.
—Aún no se bien como usar magia, lo de mis ojos se activan casi en automático...
—No, las primeras veces necesitas un detonante o concentrarte, dependerá de lo que quieras hacer. Ahora no necesitas ver, cierra tus ojos y siente tu poder; todos los Angelus tenemos magia poderosa...
—Por eso usamos aretes, sirven como un sello y a la vez un canalizador. Tú que no pasaste por el ritual el poder puede salir abruptamente o puede pasar desapercibido, pero si lo intentas no será tan difícil acostumbrarte —explica Larimar.
—Eso hicieron ustedes ¿verdad? ya saben, cuando...
—Fuimos desterrados —completa Zircon—. Sí, la diferencia es que tú solo eres mitad Angelus, quizá se te complique, nosotros pasamos la mayor parte de nuestras vidas entrenando y eso incluye controlar nuestros poderes, pero sabemos que tenemos un límite.
—Lo intentaré —cierra sus ojos y se concentra en su interior; ha estado sintiendo diferentes cosas así que sabe que está ahí, pero hasta ahora su vista lo detonaba y en esta situación no necesita otros sentidos—. Uh... no entiendo como...
—¿Qué tal un recuerdo? has experimentado el vuelo con Ángel, visualízate con alas e imagina que lo haces por ti misma —aconseja Larimar.
—También puede ayudar lo que pasó cuando peleamos con los lobos, quizá sea algo doloroso, pero puede tener la fuerza suficiente para sacarlas —complementa Zircon.
