En busca de mi Felicidad ©

19. Sonido incesante

No angel - Birdy

Haven

Los papeles en mis manos solo corroboran aquello que Grace me dijo, esta es una realidad perturbadora; no es algo que se haya inventado solo para lastimarme. Todas las hojas tienen la misma firma, el mismo remitente, el mismo costo y el mismo concepto: Haven Crow. Me siento rebasada y afligida, cada recibo es un filo cortante que lacera mi piel.

La tristeza termina por convertirse en odio, rabia e impotencia, tomo todos los papeles y los retuerzo entre mis manos, como si de esa manera pudiera cambiar lo que ya fue. Lanzo cada una de las hojas en la papelera, busco y rebusco en la habitación hasta que doy con la pequeña cajetilla de cerillas que había visto hace mucho tiempo.

Enciendo la cerilla y la dejo caer sobre los papeles, poco a poco el fuego va consumiendo las hojas, las llamas cobran vida llenando de humo y calor la habitación. Me siento sobre mis rodillas apreciando como todo se convierte en cenizas, miro a mi lado y tomo la foto que descansa en el suelo. Es la foto donde aparecen mi papá y Grace, supongo que Grace la dejo caer antes de irse.

La acerco hasta las llamas y dejo que el fuego se apodere de una de las esquinas, sus rostros se disipan y siento que con ellos mis heridas sangran mucho más. La suelto para que caiga junto a los demás papeles y que se desintegre.

Me siento y abrazo mis piernas viendo como todo se reduce a simples cenizas al igual que mi esperanza, ya no queda nada por lo que pueda luchar mas no me rendiré, solo seguiré a la corriente.

Me adentro al baño y curo mi mano que no ha dejado de sangrar, tomo una ducha larga no obstante siento que el jabón no basta para limpiar mi sucio cuerpo, tomo la esponja y restriego mi cuerpo con fuerza, sollozos lastimeros escapan de mis labios porque jamás lograré limpiar lo que aquel hombre ensucio. Jamás limpiaré mi alma.

Me detengo al ver mi piel enrojecida, arde demasiado pero aun así no siento mejoría. Sigo estando manchada por las manos de aquel hombre, sigo sintiéndome como un juguete usado y desgastado, un juguete que ya no vale nada.

¿Cómo alguien podría amar a una persona tan manchada y perturbada como yo?

¿Quién consideraría bella a una persona que le fue arrebatado lo más valioso que posee?

No importa hace cuánto tiempo paso, duele como si hubiera sido ayer, siempre creí que Ben había sido el único hombre en mi vida pero ahora entiendo que no.

Los dolores que percibía aquellos días, ahora lo entiendo todo, todo cuadra a la perfección. No era una cosa de mujeres como decía Grace, era el simple hecho de que abusaron de mí.

¿Cómo no lo pude ver? Fui tan ingenua, tan estúpida.

¿Cómo se supone que podré ver a Ben a los ojos?, ¿Con que moral y dignidad le entregaré mi cuerpo si ya no me pertenece?

Mejor dicho, nunca me perteneció.

Salgo del baño vestida tan solo con mi ropa interior, la habitación se encuentra cálida pero no es algo que logre percibir, el olor es intenso pero no le doy importancia.

Mi mente evoca a todas las personas que quiero y que significan algo para mí, agradezco que estén lejos porque no quisiera que conocieran a esta Haven tan destrozada.

Soy como un pequeño alfiler y todos los que amo son un globo a los cuales no puedo evitar lastimar. Aunque niegue y reniegue los terminaré lastimando, acabaré con ellos aunque no lo desee.