Aún recuerdo ese día, intentaba mover a mi gente para rescatarlas a las dos, en el ambiente se notaba la tensión y desesperación. Sabíamos a quién nos enfrentábamos, que el tipo era capaz de todo...Pero no de quitarme a mi niña.
Cuando ví su cuerpo...
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Llegamos a Seattle no violados, con ninguna parte mutilada y enteros. Me fui directo a mi casa, tropiezo con los escalones tratando de llegar a mi habitación, fue como una¨ PELIGRO EN OTRA CIUDAD¨. Pero tengo que admitir que estuvo divertida la situación. Al llegar tiro mi maleta al suelo y me siento en mi cama, tengo como un momento de viaje astral pensando en cosas aleatorias.
Suena el celular sacándome de mis pensamientos, leo la ¨MARAVILLOSA PERSONA¨ que me está marcando. Es Matthew.
-¿Qué quieres?- Pregunto toscamente.
-Quiero salir contigo, creo que lo que hice no estuvo bien, además arruiné tu día especial niña.- Volteo los ojos, se su palabrería barata, quiero comenzar engatusandolo a uno para seguir cometiendo los mismo errores.
-Pasa por mi a las 4:00 pm.- Cuelgo y tiro el teléfono, para despejar mi mente decido hablar con mi loca, la chica que por más tristes que estén los días sabe sacarme una sonrisa en medio de ellos.
-¡QUE LO QUE MAMI!- Escucho la pintoresca voz de Chilito por medio de la computadora.
-Hola Chilito.-
-¿¡Que pasó bebé?! ¿Por qué esa cara?-
-Matthew me invitó a salir para ¨emendar lo que hizo¨.- Hago comillas en las últimas palabras.
-¡Ve a decirle que se meta un palo por el cu!-
-¡Lara!- Interrumpo su parlamento antes que diga la palabra altisonante.
-¡Es que es la verdad!- Sus ojos azules como el mar resaltan expresivos.
-Verdad o no, quiero escuchar toda la estupidez que tiene por decir.-
-Mándale coñazos de mi parte.- ( Coñazos: Golpes propinados por una persona que le tiene molestia a otro individuo. ) Río ante su respuesta.
-¡Está bien!- Ruedo los ojos divertida.
-¡LARA VEN A BAÑAR A LUNA!- Escucho la voz de la madre de Lara en la videollamada.
-¡YA VOY MAMÁ!- Grita la chica pelirosada frente a mi.
-¡Uy nununu, estoy que me corto las venas con un cuchillo de plástico!- Río sonoramente por segunda vez.
-Te dejo para que bañes a la hermosa Luna.-
-¡Okey Pandita,bye.!- Lanzo un beso a la pantalla y me desconecto.
...
Llegamos a una de las tantas pistas en la cuál corre Matthew. O sea hasta para pedirme perdón me trae a sus lugares.
-Quiero pedirte disculpas mientras entreno, no quería perder la practica pero quería hablar contigo.- Empieza a correr lentamente mientras me mira.
-¡Sabes que no me gusta nada que tenga que ver con deportes!- Empiezo a trotar para estar a su lado mientras hablamos, las bubis ( Las pocas que tengo ) me rebotaban mientras corría, así que las tapo con mis manos.
