Damas y caballeros, sean invitados a encender sus motores. Pues tendremos a Michael Schumacher nuevamente en la Fórmula 1. Schumacher Racing se sumará este año, conformando así, uno de los ahora once equipos que competiran para el gran campeonato mu...
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24 DE MAYO 2019 VIERNES: PRACTICE DAY MONTE-CARLO, MÓNACO
Pensé que parte de mi lo había levemente superado, pero no, tenía mi mirada puesta en el McLaren que estaba distraído frente a mi, pensando en cuál burrito agarrar del mesón de la cafetería.
El hecho de tenerlo frente a mi hacía que mis piernas tiemblen y que mis manos suden, como todas las veces anteriores.
Solo que esta vez no corrí hacía él para abrazarlo. Ahora, simplemente corrí por el paddock hasta la parte de Schumacher, cruzandome a diferentes personas que me sonreían en el camino.
—¿Huyendo de Norris?— me pregunta Lance al verme entrar, yo solo me senté a su lado, visualizando el yogurt de vainilla que el mayor comía.
—Creí que no me afectaría tanto verlo. Pero verlo fue cómo... no sé. Sentimientos encontrados. No supe que hacer y salí corriendo.— dije, recuperando mi respiración mientras veía directo hacía mi compañero.
—Clara.— me dice él, mirandome seriamente a los ojos.
—Sé lo que dirás...— le digo yo, ocultando mi rodeo de ojos al girar la cabeza.
—Mírame, y escúchame Fangio.— me dice Lance, haciéndo que mi vista se vaya directo a él.
—Se que quizás duele verlo, pero no vas a poder esconderte toda la vida, Clara. Tenes que superar la situación, no te estoy diciendo que te obligues a superar a Norris, simplemente hay que aceptar lo que está hecho. A no ser...— yo simplemente atino a fruncir mi ceño, mirándolo fijamente.
—¿A no ser de qué?— le pregunto, mientras el me mira soltando una sonrisa burlona.
—Mierda, Clara. Verdaderamente te gusta, ¿cierto?— ahora soy yo la que suelta una risita.
—Estoy a dos días de tener la carrera de mi vida y puedo jurar que me pone mas nerviosa saber que estamos en el mismo lugar.— sentí las manos de Stroll sobre mis mejillas sonrojadas.
—Podría ir y golpearlo por haberse portado como un niño, pero me ahorro la prensa machacandome, mientras te abrazo.— solté una leve risa, abrazando a mi mejor amigo mientras cierro mis ojos.
Ambos nos separamos al escuchar como la puerta se abre de golpe, y no puedo evitar girar mi cabeza rápidamente.
—Dime dos palabras para que no vaya y le pegue con mi zapato en la cara a ese infeliz.— solté una gran sonrisa al ver como Carolina tiraba su bolso al piso y se acercaba a mi con los brazos abiertos.
