El Rechazo Duele ✔️ [Padecientes #1]

🥀Capitulo VIII: La Chispa En La Oscuridad🥀

CYRUS FERRO

No lo entiendo.

Lo intento pero no puedo.

No lo supero.

¿Cómo carajos le hizo a la chica que se desvivía por el?

¿Cómo carajos esperó a que Storm escupiera la bomba que haría que toda su alma se se rompiera en mil pedazos?

Ni el iceberg que chocó al Titanic fue tan cruel.

Se suponía que seria una noche para desahogar nuestras vivencias de la ultima semana y alentar a Elena con el castigo de su profesor pero Garibaldi arruino todo con su sorpresa o mas bien diría Tormenta.

Y como si eso solo fuera una probada de un nuevo y agrio sabor, Storm se folló al ciego de Garibaldi en la esquina oscura de Fred's, la pobre tuvo que aguantarla hablar de Garibaldi como si fuera una propiedad y presenciar aquello fue la gota que necesitaba para salir corriendo hecha un mar de lagrimas.

Hasta me había creído que finalmente dejaba de ser cínico con respecto a Elena.

No obstante se percato que había nadie en nuestra mesa además de mi, dejo de follarse a Storm y salió corriendo a la salida pero ya era demasiado tarde, Delfina y Jennifer la llevaron a donde podia llorar en paz sin verlo hasta cuando decidiera volver a casa.

—Eres un completo idiota.—Le musito al ver su rostro con sus ojos azulados levemente cristalizados volviendo a la mesa mientras la insoportable de Storm se aburrió de esperarlo. Le doy un trago a la cerveza y se la extiendo.—Yo si fuera ella te habría golpeado.

En realidad lo habría matado pero un corazón roto jamás olvida.

—Manzanita.—Murmuró dejando ver como la tristeza y la soledad azotaban aquella mirada azulada con tonos de gris.

Aflicción se le dice pero sentirla, padecerla es diez veces peor.

Luego de aquella escena, llevamos a Storm a su mansión y que el Lunes se vería con Garibaldi, no tienen que ser explícitos para que entendiera que iban a tener una de las famosas sesiones de Federico.

El realizo una mueca y soltó lo siguiente:

—Ansió que sea Lunes.

No lo mato por Elena.

No lo mato por Elena.

No lo mato por Elena.

No lo mato por Elena.

No lo mato por Elena.

Solo puedo suspirar mientras recuerdo mentalmente que por asesinato pasional puedo irme a la cárcel por una pena mínima de diez años y como seria un asesinato agravado, serian veinte años de prisión.

Las motivaciones no me faltaban, mucho menos la estrategia de como llevar a acabo el asesinato del culpable de este desastre. Tranquilamente podría ir buscar un veneno o a una tienda de armas o simplemente estrellar nuevamente mi auto para saciar mi deseo vengativo de acabar con la vida de mi mejor amigo pero desgraciadamente algo me lo impedía.

O mas bien alguien.

A pesar de ahora debe estar llorando hasta su cuerpo no le quede ni una lagrima para derramar, le debe aun guardar un lugar en su corazón.

Porque los corazones como los de Elena son aquellos que aman de verdad.

Y Garibaldi lo sabia perfectamente.