El Rechazo Duele ✔️ [Padecientes #1]

🥀Capitulo XV: Estupefacción exponencial🥀

—4 de Julio de 1963.

Uno: Nunca dejes verte derrotada, siempre ten la cabeza alta.

— Mataron al Presidente Kennedy, su mujer Jackie conjunto con su vice se hicieron cargo de los Estados Unidos hasta la próxima elección.

—7 de Noviembre de 1972.

Dos: Aunque duela el pasado, debes seguir adelante.

—Los Estados Unidos entran en un conflicto por el petróleo con Medio Oriente y entra en crisis la bolsa de comercio.

—11 de Septiembre de 2001.

Tres: Un día de lluvia no opacara veinte días de sol.

—Hubo un atentado a los Estados Unidos donde tres misiles impactaron en las torres gemelas de Nueva York, en el Pentágono y a un avión en Pennsylvania causando miles de muertes.

—¿Y como se las ingeniaba para saberse hasta que tipo de enjuague bucal utiliza el fisicoculturista de su vecino?—inquiere Michaelson un poco aturdido de mi habilidad de responder concisamente sus preguntas sin llegar a perder la respiración o a trabar mi lengua.

¿Y como llegamos a esto? 

Sencillo, todo es culpa de mi propia tortura.

Un funeral no alcanza para enterrar un corazón en vilo con años plagados de esperanzas e ilusiones muy poco lumínicas, el tiempo y las canciones tristes tampoco ayudaron. 

—Una cosa es el amor adolescente, Pucca...

Ese apodo, todo menos ese apodo.

Deje de escucharlo por completo, la pena inesperadamente me ha invadido, consumiendo cada fibra de mi cuerpo y siento como levemente mi corazón se estruja.

—¿Me ha escuchado o sigue en una sección pornográfica con el fisicoculturista?

Ups, atrapada.

No me sorprende de tu parte.

Te contaría los detalles pero estas lidiando con tu dolor y debes demostrar que eres mucho mas que un drama adolescente.

—Prometió no demandarme si le enseñaba mi bitácora—evado inteligentemente con mi mano extendida en su dirección—, ahora devuélvemela.

Parece jugar con las paginas, sus dedos suben y bajan lentamente poniéndome nerviosa la manera en que su vista realiza movimientos que logran desestabilizarme como el silencio que se produjo luego de la ronda de preguntas. Michaelson realizó muecas, asentamientos entre otras expresiones faciales que no sabría reconocer con exactitud pero logran que quiera faltarle el respeto y emita un sonido en lugar de dejarme en el abismo sepulcral.

—Lastima que no trajo su diario—expreso el insípido profesor luego de darle un tributo a mi bitácora y retirase los lentes de lectura—, un poco de contexto le habría dado el toque mágico esta telenovela.

Me cruzo de brazos, indignándome por su comentario, mi vida personal no es la telenovela de la tarde antes del noticiero de las ocho.

¿Segura?

Cállate.

—Me pregunto seriamente si este castigo es una oportunidad o un recordatorio de como será mi tortura cuando llegue al infierno.

Cálmate.

—Le agradezco de confirmarme las teorías de que no es una santa—.Entrelazó sus dedos y su mirada hacia mi con cierto destello, ¿Qué escondes Ashton? —Ahora me pregunto, ¿Qué me encontraré en el próximo capitulo?