Cap. 7 - La cena

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Narra: Adriana

7:20am

Hoy era el día en el que Gustavo me iba a invitar a un lugar, que todavía no sabía cuál era. Pero de igual manera, confío en él. Aunque primero que todo, debía ir a la facultad.

- Adri... levantáte - Valentín me despertó.

- Ya voy - Susurré estando medio dormida. - ¿Vas a ir a la facultad? - Pregunté antes de levantarme de la cama.

- Si, boluda, obviamente voy a ir - Respondió mi hermano.

- Bueno, salí, que me tengo que bañar. - Yo ordené y él salió de mi habitación.

Evidentemente me dirigí al baño para darme un buen baño, también estaba pensando en que sí Gustavo iría por mí o me iba a dejar plantada. Ese era un miedo que se iba haciendo presente. Aunque no quería pensar en eso, me era imposible, ya he tenido ese tipo de experiencias y realmente era algo desagradable. Que no se lo deseo a nadie.

La ducha fue bastante rápida, ya que tenía prisa de llegar con tiempo a mis clases, aunque ya no hacíamos muchas cosas, pero aún así, quería llegar.

Salí del baño y me cambié de ropa, me peine, etc, etc, una vez estando vestida, ya pude bajar a desayunar.

- Hola, buen día - Saludé a mí familia, que ya estaba en la mesa.

- Buenos días ¿Cómo amaneciste? - Mi mamá preguntó, mientras me entregaba mi plato de comida.

- Pues bien, diría yo. - Le respondí a mi mamá y mi hermano sonrió.

- ¿Nos vamos a ir juntos? - Me preguntó Valentín.

Yo asentí. Y sonó el teléfono de la casa, era muy temprano ¿Quién podría estar llamando a esta hora? Yo iba a contestar, pero mi hermano se interpuso y me dijo que el atendería el teléfono.

- ¿Sí? - Dijo mi hermano a la bocina del teléfono y después resopló. Me puse detrás de Valentín a una distancia moderadamente buena. Creo. Y pude escuchar que era la voz de Gustavo. Inmediatamente me puse nerviosa.

- ¿Esta tu hermana? Quiero hablar con ella - Dijo Gustavo tranquilamente.

- No vas a hablar con ella, ni nada. - Mi hermano susurró, para que mi mamá no escuchará, mi mamá o yo, no sé, pero yo ya había escuchado.  - No te quiero ver cerca de ella, ni mío, mucho menos de mi mamá. ¿Escuchaste bien? - Advirtió mi hermano con el mismo tono de antes.

Gustavo suspiró del otro lado de la línea, y colgó. Mi hermano se quedó pegado en el teléfono para ver si realmente había colgado el teléfono. Puso el teléfono en su lugar y se giró para encontrarse conmigo, los dos nos miramos, yo no sabía que decir y creo que el tampoco.

- ¿Por qué te peleaste con Gustavo? - Pregunté en un susurro, aún estaba ahí parada.

- Adri, esto no es de tu incumbencia, por favor, evita meterte en eso ¿Sí? - Mi hermano se relajó y respondío muy tranquilo.

- Pero, es que Gustavo también es mi amigo. - Respondí tranquila al igual que él.

- Gustavo no es lo que parece. - Fue todo lo que me dijo y se fue, no se veía molesto, o eso parecía. Ahora me dejó muchas dudas.

¿Debía salir con Gustavo? ¿Y si Gustavo sólo se está burlando de mí y me quiere ver la cara? ¿Y sí Gustavo me estaba usando? ¿Que tal si mi hermano sabía de eso?

Muchas preguntas y ninguna respuesta. Eso era lo único que obtenía. Y no me gustaba para nada, porque sabía que esas preguntas, cuando tuviera a Gustavo de frente se iban a resolver de golpe, o se me iban a olvidar.

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