Reescribiendo las estrellas

Capítulo XXXVI

POV: Juanjo

- ¿Qué es esto?, no me lo puedo creer.

Juanjo no podía quitarle la mirada de encima a Martin y lo único que pudo hacer fue irse directo a los vestuarios sin pararse en la cocina. Cuando estaba guardando su ropa en el armario se dio la vuelta y vio que Martin caminaba hacia él.

- ¿Pero qué es esto?, te queda muy bien - Le dije yo mientras le tocaba el pelo recién cortado.

- Qué guapo, Juanjo.

- Estás guapísimo, déjame ver tu traje, da una vuelta para verte.

Martin llevaba un traje blanco con una camisa de color beige y le habían puesto un pendiente, en ese mismo momento supe que no podría quitarle la mirada de encima durante toda la noche. Le habían cortado el pelo y estaba guapísimo, nunca me había puesto tan nervioso como en ese instante

- Te queda increíble, estás guapísimo cariño.

- Tú también Juanjo, estás muy guapo.

- Me voy a echar laca y ya estoy contigo.

- ¿Me puedo ir a comer mis tostadas?

- Sí, después te veo.

[...]

Había llegado el momento de la gala y Noe había subido indicándonos que debíamos bajar cuanto antes al autobús. Martin y yo estábamos juntos en la ducha hablando sobre la actuación cuando ella llegó y tuvimos que salir corriendo para no llegar tarde.

- La próxima vez os quedáis aquí chicos.

- Perdón Noe.

- Perdona mamá Noe.

- Es una broma chicos, no os vamos a dejar solos pero para la próxima intentad estar cuanto antes.

Martin y yo llegamos al plató de la mano y con muchas ganas de demostrarle a la gente todo nuestro potencial, cada vez quedábamos menos y nosotros queríamos vivir esta experiencia juntos y unidos.

- Sois los últimos, vuestra actuación cierra la gala.

La grupal nos había salido muy bien y eso era señal de que iba a ser una gala muy buena, o eso nos decía siempre Manu en sus clases.

Nuestro turno estaba llegando y cada vez estábamos más ansiosos porque veíamos que nuestros compañeros lo estaban haciendo muy bien y en esta gala había mucho nivel, teníamos que salir ahí y dar lo mejor de nosotros.

- Os toca chicos, no estéis nerviosos y centraos en vosotros.

- ¿Algún consejo que quieras darnos? - le preguntó Martin mientras me cogía de la mano para salir al escenario.

- Sólo os puedo decir que os centréis en vosotros y que creéis una atmósfera propia, olvidaos del público, del jurado y de los profes, pensad que estáis en vuestra casa cantándoos una canción y os saldrá perfecto.

- Muchas gracias Clara.

- Mucha suerte chicos.

Tenía mucho miedo porque quería que saliese perfecto, no quería que Martin saliese nominado por mi culpa, además, él se merecía una actuación espectacular, quería que la recordase toda su vida, que fuese su favorita. En el momento en el que Martin me cogió de la mano y me deseó suerte supe que todo iba a salir bien, la calma había llegado para quedarse.

Nos estaba saliendo increíblemente bien pero el momento de las cuerdas estaba llegando y eso era algo que me asustaba más que a nada. Por eso cuando mi mano rozó la de Martin y tuve que abrazarlo y girar en el aire cerré los ojos y nos imaginé caminando por la orilla del mar mientras mojábamos nuestros pies en el agua. Ese momento tan bonito fue suficiente para olvidarme de todo lo demás y centrarme en lo que tenía a mi lado, una persona que daría todo por mí sin pensárselo dos veces, verlo cantándome esta canción me hacía sentir muchas cosas, quería reescribir las estrellas con él, lo quería todo con Martin.