El azul de sus ojos

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El avión descendió en la loza del aeropuerto jfk de new York a las 11:05 AM, las casi 11 horas me habían partido el trasero, dormí muy poco, por temor al regreso del extraño y los ruidos que pudiera producir en mi. Espere mi equipaje por 30 minutos, una vez que lo tuve conmigo salí el gate numero 9, me esperaba Elen, la vi de lejos ya que saltaba y gritaba como loca

-aquí Claudia!!!!aquí!!!!

Mi hermana con cartel en mano me esperaba tras la línea acordonada.

Hablaba muy rápido, no le entendí mucho, estaba con mucho sueño, durmiendo a saltos en el avión para no soñar con el de nuevo.

Tomamos un taxi, subimos las 2 maletas......bien mis 21 días en new York acababan de comenzar, el calor era insoportable, me quité mi abrigo y quedé en mi camiseta negra tres tallas mas grandes que yo.

Llegamos luego de 1 hora 55 a su casa en Manhattan, de una sola planta, 2 baños 3 habitaciones y un patio no muy grande.

Me dejó en la pieza de invitados después de algunas instrucciones, el baño de la sala era solo para mi, el otro baño estaba en su habitación...grandioso....me tocaría pasear por la sala con mi cabello salvaje por las mañanas.

Solo quería tomar un baño, ponerme mi pijama y descansar, Elen me preparó un sándwich de atún con un vaso de jugo, no tenia hambre pero lo comí igual. Fui a mis maletas por mi pijama. Abrí una buscándolo .......... esto tenia que ser una broma.

Dentro de mis maletas solo mi pijama 2 toallas y muchas mantas...donde mierda estaba mi ropa!!!

Abrí la otra maleta, unas sabanas, frazadas, mi almohada, un jeans negro que jamás me ponía porque parecía quedar pintado sobre mi trasero, un top sin tirantes muy pequeño de Kyara, solo 1 par de bragas, 1 sujetador , mis cremas y artículos de aseo personal, unos zapatos de taco negros que yo no había empacado porque lo de usar zancos no era lo mío.

En el fondo de la maleta una gran tarjeta de corazón con puño y letra de Kyara.

"zorrita, iba a regalar tu ropa a la caridad, pero dijeron que tenían suficientes trajes de monja.....así que mientras te llenabas de alcohol después del trabajo decidí venir y ayudarte a empacar.......cómprate algo sexy....tu hermana tiene 2300 dólares que te envié, y los tiene ella para evitar que le compres ropa a Virginia y solo adquieras aquello que solo la sexy bitch que llevas dentro podría usar....juega zorrita, allá nadie te conoce, no tienes nada que perder....lo siento...se como te cabreará esto...pero si no era ahora no seria nunca.

Te amo

Ky"

Mierda....cabreada??nada...furiosa!!!, con ganas de ir corriendo y patear su atlético y tonificado trasero, perra sin corazón, despojarme de mi ropa para pasar mis días aquí de compras....detesto ir de compras.

Sin ganas empuje mi trasero al baño, me metí bajo la ducha por 15 relajantes minutos intentando que toda la pendejada de Kyara se fuera con el agua....relajada...estuve a punto de tomar agua....pero claro, acá no se bebe agua del grifo...salí, seque mi cabello y a duras penas llegue a la habitación, cerré las cortinas y la puerta y dormí.

Desperté a eso de las 3 de la mañana...tome algo de agua del frizer, mordisquee un trozo de pizza, encendí la TV....estuve hasta las 4, luego me fui de vuelta a la cama.

Venia hacia mi, era la primera vez que veía su sonrisa, wow, mataría por ella, sus dientes alineados, blancos, perfectos....venia hacia mi sonriendo.

Pantalones blancos, sin camiseta, solo su cabello que caí a raudales sobre sus hombros hasta tocar su pecho.

Deslice mi mano por su suave barba recortada marcando aun mas los ángulos perfectos de su cara....me tomó en sus brazos y caímos sobre la reposera....sus dedos se deslizaban suavemente sobre mis piernas desnudas, subiendo por debajo de mi falda, sus dedos quemaban y encendían cada parte de mi que tocaban, se recostó sobre su costado mientras su mano ya libre de mi falda decidió investigar mi rostro, bajando por mi cuello, haciendo su camino a mi pecho.

-no solo por esto-me decía, mientras acariciaba mi piel.

No podía oír su voz, pero sabia lo que decía.

-no solo por esto-volvió a decir.

Se acercó, me besó, cerré mis ojos...cuando los abrí estaba en la habitación, en la casa de mi hermana.

Eran cerca de las 9 cuando me levanté, se escuchaba a lo lejos a Paul, mi sobrinito de 3 años jugar. Mi hermana algo le decía cuando entre en la sala.

Y ahí estaba yo con mi peor peinado mientras mi hermana Elen, mi sobrino Paul y Peter, esposo de mi hermana me miraban.

-bien...este es mi cabello por la mañana, si logramos superar esto, todo será mas llevadero.

Los adultos rieron de buena gana. Mi hermana le daba instrucciones a Peter que quedaría con Paul....si un día me casaba, de seguro seria con un gringo; los hombres llevan a los hijos al parque cuando la mamá tiene algo que hacer, la mayoría de los hombres gringos cocinan y la mayoría también a vivido solo, por lo que pueden llevar el orden de una casa.

Me bañé y me puse los mismos pantalones de chandal con los que llegue, junto a mi camiseta gigante que había lavado esa noche mientras veía TV, la secadora había dejado toda mi ropa lista para usar.

Cuando salí de la habitación, mi hermana me miro de arriba abajo, torció una sonrisa y añadió:

-de acuerdo, el mundo no fue creado en un día, una vez que tengas ropa nueva, yo misma me encargare de quemar eso.

Salimos a la calle donde nos esperaba el taxi, lo tomamos mi hermana le dio indicaciones de que iríamos al Manhattan mall y partimos.

Luego de lo que pareció la eternidad, llegamos....y yo que creía que el costanera center en Santiago era gigantesco...esto eran fácilmente 6 costaneras center.

Bajamos del taxi y comenzamos mi tortura.