6.-El otro lado del cristal (4ª parte)

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Hacía mucho tiempo que no veía a su amigo, y no compartían la hospitalidad de la Odisea desde que el óptimo había recuperado su libertad diez años antes.

-La verdad es que no echaba de menos este sitio -dijo con un suspiro cuando Tristan le recibió-. Parece algo más habitable que la última vez pero sigue teniendo ese aire a muerte en el aire. No sé, no consigo quitarme la sensación de que es un gigantesco mausoleo y no me gusta visitar tumbas.

-Puede que Ulises se moleste con tu comentario -dijo Tristan recibiendo al recién llegado con un apretón de manos. El óptimo, ignoró su mano y le abrazó.

-Cretino -masculló-. Podías dar señales de vida o algo. No te hará daño cuidar un poco más tus amistades, no debes de tener muchas.

-Te mandé una felicitación por tu cumpleaños -bromeó-. La verdad es que tienes razón, pero he estado ocupado. Últimamente, las cosas se complican demasiado. Gracias por venir.

-Eso he oído -asintió Lenda-. Estuve hablando con mi preciosa ex. Me pidió un montón de información sobre Zero así que supuse que ya le habíais encontrado. Yo me hice el tonto pero le di todo lo que tenía, ¿hice mal?

-No, para nada. Ahora está aquí.

-¿Aquí? -se sorprendió-. ¿Aquí, aquí? Te refieres a aquí en la Odisea.

-Así es.

-¡Quiero verlo! -exclamó-. Quiero conocerle.

-Ahora no es un buen momento -dijo Tristan-. Está recuperándose del ataque de uno de los Eros. Telémaco intentó... suicidarlo.

-¡No jodas!

-Está fuera de peligro pero ha perdido mucha sangre y pasa la mayor parte del tiempo seminconsciente. No es un buen momento. Puedes hablar con Nullien, ella te pondrá en antecedentes.

-Oh, lo haré. ¿Ya sabe ella que yo venía? -preguntó divertido.

-Por supuesto, me ha pedido una orden de alejamiento -comentó Tristan-. Pero no se la he dado. Seguramente se pondrá enferma mientras tú estés por aquí.

-Oh, vamos, yo quería saber qué tal les había ido el viaje a Óptima. Adoro a los padres de Null. Echo más de menos a mis encantadores suegros que a ella.

-Seguro que ella está deseando contártelo todo con pelos y señales.

-Hablando de pelos y señales...Observarás que he tenido la decencia de no sacar a colación determinado tema un poco embarazoso. -La mirada cómplice de Lenda no dejaba lugar a dudas sobre el tema en cuestión-. Eso no implica, ni mucho menos, que no quiera conocer hasta el más ínfimo y miserable detalle de vuestro apasionado rencuentro. Porque... fue apasionado ¿verdad?

Tristan se permitió una sonrisa y asintió.

-Lástima de la interrupción -recordó-. Aunque supongo que debo agradecer a Ulises que no lo hubiera hecho en un momento más inoportuno.

-Uy, eso debe de joder mucho -exclamó con una mueca de dolor.

-Ni te lo imaginas. Se suponía que la reunión corporativa tenía que haberse celebrado la semana pasada, entonces, tendría la Odisea para mí solo y tendría algo de margen de maniobra. Pero todo se ha complicado y ahora, Zero es el maldito centro de atención que tiene que decidir los movimientos de la empresa, según si decidimos matarlo y deshacernos de él; matarlo y cobrar la recompensa; matarlo y entregarlo a trozos, no necesariamente en ese orden o...

-Espero que ese «o» implique algo mejor que las otras opciones porque si no, tu problema de soltería se va a agudizar que te cagas.

-... o que se crean que es un chiquillo enamorado de mí al que podemos utilizar para destrozar su propia compañía.

Nadie es perfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora