MUNDOS OPUESTOS-PABLOGAVI

63-La mentira II

*Dalia*

-¿De qué hablas?-me dijo confuso y yo volví a llorar llevando mis manos a la cara.

Siempre me iba a sentir inferior a él, siempre iba a estar en deuda y una relación así no iba a llevar a ningún lado y yo lo sabía, aunque me doliese.

-No entiendo como no me lo dijiste, ni siquiera me lo consultaste y alomejor yo...yo no estaba de acuerdo-le dije y el apartó mis manos de mi cara.

-mi vida, no se que de hablas, te lo juro no...-me dijo limpiando mis lágrimas pero lo corté.

-No me jures más, eres un Mentiroso, como mi padre y como los tuyos, todos lo sabíais, ¡todos!-dije dolida sin poder parar de llorar.

-Dalia me estas poniendo nervioso, ¿de que hablas?-me dijo llevando sus manos a las mías agarrandolas.

Me levanté para ir a buscar los papeles al despacho, y el me siguió, le tiré la carpeta negra y por su cara sé que la reconoció al instante.

Negó abriendo los ojos y después dirigió sus ojos a mi.

-Lo hice por ti, y lo volvería a hacer, no te merecías nada de esto-me dijo dejando la carpeta a un lado.

-¡no tenias que meterte!-le recriminé.

-¡Eres mi novia! Solo quería que estuvieras bien mi amor...-me dijo intentando abrazarme y yo me negué apartándolo.

-No lo entiendes, ahora voy a sentirme en deuda contigo siempre...-murmuré limpiando mis lágrimas.

-¿Qué deuda? ¿Qué dices? Dalia por dios eres mi familia, no me debes nada-me dijo negando.

-No me toques pablo, no lo entiendes..

-No, no lo entiendo-me dijo serio y enfadado-¡es sólo dinero!

-¡No es sólo dinero!-le dije negando y el suspiró posando sus manos en sus caderas mientras negaba.

No me entendía, porque para el era solo dinero, pero para mi era sentirme inferior, y endeudada, no entendía como mi padre había aceptado algo así.

-Voy a devolverte todo el dinero-le dije sería y el suspiró.

-No vas a devolverme nada, porque no es tuyo, es de tu padre-me dijo tajante.

-¡Me da igual lo que digas, estoy harta de que todos me engañéis! Os creéis que soy estúpido y...-llevé mis manos a mi sien cuando otro mareo se apoderó de mi.

Solo escuchaba como él me llamaba mientras sujetaba mi cuerpo, y no recuerdo nada más...

*Gavi*

-Gavi, no ha sido culpa tuya-me dijo Manuel pasando el brazo por mis hombros y yo seguí mirando al suelo con las manos en mi cara.

Estaba agobiado, y no me apetecía hablar con nadie, no entendía como podía haberle molestado tanto cuando solo lo hice por ella.

Otra vez estábamos en el hospital, solo que ahora la ingresada era Dalia, que se había desplomado en mis brazos mientras discutíamos.

Tenía la tensión baja porque se la midieron nada más entrar, pero no nos habían dicho nada más.

-¿Qué ha pasado?-preguntó leire llegando a paso ligero.

Ni siquiera abrí la boca, porque es que no tenía fuerzas para hacerlo, todo me superaba a estas alturas.

Fue Manuel el encargado de contarle a leire que pasaba, y después a mis padres, que llegaron poco después.

-Gavi, se que no te apetece hablar, pero ella es así y no le gusta que nadie la ayude nunca-me dijo leire en un intento de consolarme, pero negué rápidamente.