*Dalia*
En cuanto salí de la casa me monté en el coche y llevé las manos a mi cara rompiendo a llorar, ¿enserio el pensaba todo eso sobre mi? ¿Qué le había estafado?
Sentí unos golpecitos en el cristal de mi coche y me giré viendo a pablo padre con expresión triste.
Abrí la puerta del coche limpiando mis lágrimas y el corriendo se dispuso a abrazarme.
-Entra dentro Dalia, hazme el favor, no puedes conducir así-me dijo mientras acariciaba mi pelo y yo negué al separarnos.
-Me voy pablo-dije intentando cerrar la puerta pero el lo impidió.
-Hija, hazme el favor, voy a estar preocupado si te vas así-me pidió y yo cogí aire intentando relajarme.
Estaba dispuesta a salir fuera con el un rato hasta que me relajase, de hecho estaba apunto de hacerlo cuando vi que pablo salía de casa a paso ligero.
Cerré la puerta del coche y vi que el ruido hizo que mirase a mi dirección, y casi que vi como apresuraba el paso hasta mi coche, pero entonces arranqué y di un aceleron perdiendolo de vista.
No quería ir a mi casa, porque seguramente el se presentaría allí, pero ya era tarde, lo que me había dicho era demasiado fuerte.
Estaba dispuesta a arreglar las cosas con el, pensaba devolverle todo y empezar desde cero, pero sin dejar lo que ambos teníamos, sobre todo porque ahora había algo que nos iba a unir para siempre, estaba decidida a contarle sobre mi embarazo, pero después de esto no quería que mi hijo creciese al lado de alguien que podía llegar a pensar eso de supuestamente la persona de la que está enamorado.
Pero cuando escuché todo lo que pensaba, la forma de darle la vuelta a todo, comprendí que no me quería, porque yo jamás habría pensado algo así de él.
Fui a nuestra cima, donde habíamos venido tantas veces, y salí del coche mientras me sentaba en las rocas y miraba toda Barcelona, posé la mano en mi abdomen y suspiré secando mis lágrimas, al menos me quedaba mi bebé...
*Gavi*
-Gavi-dijo Manuel al abrirme la puerta sorprendido, como si no esperara verme aquí.
-Necesito hablar con Dalia, es urgente-le pedí entrando en la casa donde había vivido los últimos meses casi sin esperar su respuesta.
Iba a subir a nuestra habitación, pero el cogió mi brazo frenándome.
-No está-me dijo y yo fruncí el ceño, ¿Cómo que no estaba?
-¿Dónde está?-Le pregunté con algo de urgencia en la voz pero el se encogió de hombros.
-Lo último que sé es que había ido a tu casa para hablar sobre...-lo corté.
-Si, sobre el dinero, pero ha salido antes que yo, ¿como que no está? ¿Dónde puede estar?-Le pregunté y el se encogió de hombros.
-Quizá con Leire-me dijo y yo asentí saliendo nuevamente de casa-¡Gavi!-me llamó.
Me giré en su dirección esperando que hablase, tenía sus ojos algo vidriosos, como si quisiese llorar.
-Mi niña te quiere, lleva días encerrada llorando y me duele que todo esto sea por mi culpa, se que os hacéis felices, y voy a hacer todo lo que esté en mi mano para que lo solucionéis-me dijo y yo sonreí triste.
Fui hasta el dándole un abrazo que le pilló por sorpresa, pero después me apretó con más ganas.
-Tenemos una conversación pendiente, pero escúchame Manuel, no puedes confiar en Saúl-le dije al separarnos.
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MUNDOS OPUESTOS-PABLOGAVI
FanfictionDalia, una chica con muchos problema. Pablo gavi, un chico con la vida de sus sueños. Una apuesta de por medio. Tres meses para enamorarla. Y si al final...¿El que más se enamora es él?