Hermanitos. (TERMINADA)

70:Un momento inolvidable y muchas palabras por decir.

DEDICADO A MAJO, POR PONERLE TANTO CARIÑO E INSPIRARME A SEGUIR ESCRIBIENDO.

Seguimos subiendo en la montaña, esta vez, Bárbara nos alcanza a Matt y a mí, enseguida me pega hacía ella, dándome una abrazo de lado.

- Amiga, enhorabuena, estoy muy orgullosa de ti.- me dice ella, sonriente.- Ya era hora de que Diego tuviera su merecido.- replica ella, dando un puño al aire.

- Es que, realmente es un imbécil, luego de que lo trate tambien, despues de todo lo que me hizo y todo lo que me dijo, ahora me hecha mierda, como si yo fuera la culpable.- le digo.

- Esta bien, ahora solo tienes que relajarte y seguir subiendo esta montaña.- dice Matt, alentandome.

Y tal vez siga haciéndolo, tengo mucho tiempo sin subir a una montaña, ya ni recordaba la sensación de mis pulmones ardiendo, ni mis mejillas calientes, tampoco de mis manos. Aunque creo que lo de las mejillas y lo de las manos es más por la rabia que acabo de pasar.

Ahora, Anavi nos alcanza.

- Los chicos están más abajo, intentando calmar a Diego, aún.- dice Anavi, con media sonrisa.

- ¿Está llorando?- pregunta Bárbara, quitándome las palabras de la boca.

- Casi, está respirando muy rápido y lanzando golpes al aire. Además de gritar como psicópata.- responde Anavi- Pero, igual hiciste lo correcto. Un imbécil como él se lo merecía.

Diego es una de las personas que simplemente es muy sensible, y no en el buen sentido. El puede destruirte en dos segundos, aun así, puedes perdonarlo. Pero no le quites una pieza de si mismo, jamás te lo perdonará.

¿El tiempo lo cura todo? Para Diego esa frase es mierda.

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Pasaron algunas horas, y aun no supero que no hemos llegado a la cima de la montaña. Estoy sedienta y ya está bajando el sol. Siento que llevo una eternidad escalando.

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Pablo narra:

Por cuestiones de seguridad, tenemos a Diego más abajo de las chicas, sino, armaría un numerito, peor que el que tiene ahorita.

- ¡JAMÁS DEBÍ DEJARLA ENTRAR DE NUEVO EN TU VIDA! ES UNA ZORRA, YA ME TIENE HARTO, DE VERDAD, ES UNA ZORRA, ES UNA MALDITA ZORRA.

Ya simplemente lo ignoramos, el solo quiere llamar la atención en este punto de la rabieta. Es algo normal, pero si sigue gritando, se me saldrá la Dalia que llevo por dentro ahora mismo.

- OH DIOS, SI FUERA UN CHICO LE HUBIESE DADO UNA PALIZA.

- ¡YA BASTA DIEGO! Compórtate como un hombre por una vez en tu vida, pareces un bebé haciendo un berrinche, llevamos horas, y sigue gritando como psicópata. Mejor te callas, sino recibirás una paliza de parte de mi.- hasta ahí llegue.

Diego se queda callado, como perro regañado.

Allí está, es un niño, no más que eso, la verdad es que ya se merecía un regaño como el mío.

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Dalia narra:

Ya estamos llegando a la cima y casi llevo mi agua a su acabe. El sol está perfecto, como para pasar horas aquí sentado, admirando. Los demás van más abajo de nosotras, mientras, Ashley y Sofía más adelantada que nosotras, ellas están acostumbradas a subir montañas o este tipo de cosas.

Cuando al fin llegamos, fue como el cielo lo sentimos tan cerca, las personas tan cerca y el mundo a nuestros pies.

Nos sentamos en algunas piedras que se nos atravesaron y empezamos a gritar. Anavi, Bárbata y yo gritamos:

- ¡SOMOS LAS REINAS DEL MUNDO!

Y yo como siempre tan creativa, agregue:

- JODANSE GENTE DE PAPEL.

Lo sé, soy un delirio.

Baje la vista más allá, y vi el mundo, y aunque el vértigo recorría mis venas me senté justo en el borde, con mis pies en el aire, preocupada que se me caiga un zapato.

- ¡Estas loca! Eres una rebelde- dice Ashley, yo la mando al diablo con una sacudida de mi mano, como diciendo "fuera de aquí, perra"

Bárbara se sienta junto a mi, y pasamos mucho tiempo sentadas, en silencio, mientras los otros gritaban sin parar, nosotras solo mirabamos al más allá. Y la verdad, es que el sol estaba perfecto, sus rayos ultravioleta se reflejaban a lo largo de las nubes y del cielo.

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Yoliana narra:

Estoy junto a Mavi, ella y yo estamos felices, abrazadas, aprovechando el momento de que hoy es basicamente es uno de los mejores días del viaje. Junto a este atardecer y a estas personas, hasta me dan ganas de llorar.

Y todo arruina el momento cuando Mavi tropieza y se cae, cayendo sobre su coxis. Me río sin parar, de ella, obviamente. Ella se ríe, pero no tanto como yo, Pablo me sigue la corriente, la ayuda a levantarse mientras se ríe también.

- ¿Te dolió?- le pregunto, con una sonrisa en mis labios.

- Nooo, no me va a doler.- dice ella, claramente con sarcasmo.- ¡CLARO QUE ME VA A DOLER! ¿No ves que esta mierda esta llena de puras piedras?- casi grita, sacudiendo la parte de atras de su trasero, lo que me hace reírme un poco más.

- NO NECESITAS HABLARME ASÍ.- le grito, pero lo hago en broma.

- YO TE HABLO COMO ME DE LA GANA.- me devuelve ella, de nuevo en broma. Finjo estar impactada y luego nos reímos las dos.

Y me doy cuenta que somos unas verdaderas idiotas, pero así somos, idiotas felices. Unas enfermas mentales y más nada aparte de eso. Siento que tal vez este momento nadie no los puede arruinar.

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Anavi narra:

Descanso mi cabeza en el hombro izquierdo de Bárbara, ella sonríe. 

- Chama te quiero mucho.- me dice Bárbara, su tono suena serio. 

NOTA DE AUTORA: ¡SI NO SABEN QUE SIGNIFICA CHAMA, VEAN A LA DIVAZA, LES ASEGURO QUE APRENDERÁN MUCHO DE ESO!

- Yo más.- le devuelvo, ella vuelve a sonreír.

Este momento se me hace muy cursi, pero es uno de los pocos momentos que he tenido así con ella.

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Majo narra:

Estoy junto a Mujica, estamos sentados en dos rocas perfectas y confortables para nuestros traseros.

- El sol esta muy bonito ¿Cierto?- digo, el solo asiente. Parece que estuviera molesto conmigo, aunque no sé exactamente porqué.

El mismo me ha estado acosando, el mismo ha estado callado, yo no le he hecho nada, solo ha estado haciendo cosas estupidas para llamar mi atención.

- Lo siento si he estado un poco callado, simplemente me siento un poco incomodo por nuestra situación.- dice él, leyendo mi mente.

- ¿Cual situación?- disparo.

- Majo, tu sabes muy bien cuál es nuestra situación.

- Esa situación la pusiste allí tú solo, creeme.- vuelvo a disparar, esta vez, más cerca del corazón.

- Maldita sea, mejor callate Majo.- dice Mujica.

Y ahí mueren las interacciones y las conversaciones que hemos tenido.

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Que taal!! Pues si, volví a actualizar, quiero hacerlo muy rápido. Espero les haya gustado este capitulo, si es así, ya saben lo que deben hacer. Gracias a mis amigos por darme su gran apoyo en esta historia. 

Bye! Gracias! :)