Capítulo 29: Mismo destino

21.8K 2.9K 1.9K
                                    

“No renuncies al miedo o al dolor, uno te recuerda lo que el otro te enseñó”

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

“No renuncies al miedo o al dolor, uno te recuerda lo que el otro te enseñó”.

La presencia de Bastien Hewitt fue algo que nadie esperó en absoluto. Había pasado un mes desde la última vez que se supo del muchacho y, tanto Kaden como Viviane, Denis y Jesse, se hicieron a la idea de que algo horrible le pudo haber pasado. Sin embargo, su manifestación demostró cuán equivocados estuvieron todos. Desconocían la razón de su verdadera ausencia, pero no durarían en indagar al respecto. Debió tener algún buen motivo para haber desaparecido un mes.

El varón portaba en su espalda una mochila la cual se disponía a dejarla en su respectiva habitación. Algunas miradas indiscretas se posaron en su figura, cosa que el chico no se dignó a prestarles atención. Pudo notarse un ápice de recelo al entrar nuevamente en Annavenim, aunque aquel sentimiento no duró mucho cuando anduvo con la cabeza alta por los pasillos.

—Uy, quietos. ¿No estaba muerto? —formuló Kaden observándolo con asombro —. Punto para nosotros.

—Parece más serio que de costumbre —opinó Viviane.

—¿Dónde creéis que ha estado? —indagó el rubio.

Kaden respondió:

—La madre Prudence me dijo que su familia se lo llevó porque Bastien tuvo episodios de depresión. Aunque, sinceramente, no me lo creo. Es difícil encontrar veracidad en este lugar con todo lo que está ocurriendo.

—Vamos a seguirle. Tenemos diez minutos antes de que comience la próxima clase —dijo la chica.

Dicho aquello, los jóvenes anduvieron cautelosos por los pasillos hasta llegar al ala norte. Bastien se encontraba sentado en lo que era, todavía, su cama. Estaba abriendo su mochila para sacar algunas pertenencias que anteriormente se había llevado. La presencia de los cuatro no hizo que el muchacho se interesara, ni mucho menos tenía intenciones de entablar una conversación con alguno de ellos. Su rostro adusto y enojoso llamó la atención de los adolescentes.

Hace un mes, cuando Bastien aún no estuvo fuera durante ese tiempo, mencionó que sería el próximo en caer de Annavenim. El hecho de haberse mostrado acongojado aquella noche se le vio un sentimiento real del que ahora carecía.

Kaden comenzó a barajar la idea de que, sino se habían desecho de Bastien como al resto de alumnos, a este joven le querían hacer parte del rebaño: No hablar, ni mencionar a Eloy Sadler. De lo contrario, tendría un cruel destino. Le estaban dando una última oportunidad para salir con vida.

El chico tuvo una discusión con Eloy Sadler antes de morir y ninguno de los presentes tenían constancia del motivo de la trifulca, salvo Bastien.

—¿Dónde has estado? Llevas un mes sin dar señales de vida —interrogó Jesse.

Bastien se percató que Denis tenía posado su brazo alrededor de los hombros de Jesse. Aquel gesto de notoriedad hizo que el joven apretase sus dientes.

Un peligro para sí mismo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora