Capítulo 17🌷

22.1K 2.7K 374
                                    

Tomé entre mis manos el cuaderno de Mara y comencé a revisarlo para comprobar si había alguna tarea que ella no hubiese hecho. La niña se encontraba en clases, al igual que su hermana quien había pasado casi toda la semana demasiado ocupada en sus actividades y proyectos finales. Estaba sentada en uno de los muebles de la sala, al lado de Eiden quien miraba un nuevo partido de fútbol en la televisión.

—Samara ¿Puedo preguntarte algo?

—¿Debería responder?—lo miré directo a los ojos y notando tanta seriedad en él, solté una risita—. Está bien, pregunta lo que quieras.

—¿Eliam y vos tienen algo?

Se me cortó la respiración al instante, entreabrí un poco los labios por la sorpresa mientras mi cuerpo se inundaba de nervios. Había imaginado cualquier pregunta, menos esa.

—Eh...

—Sé sincera conmigo, por favor.

Dios ¿Por qué tenías que meterme en estos problemas?

Quería decirle una mentira, pero también recordé que él había sincero al contarme lo que había sucedido entre ellos. Y sinceridad con sinceridad se paga.

—No me siento muy cómoda al tener que decirlo, pero—me pasé las manos por la cara un poco apenada—. Tuvimos algo, bueno, si es que puedo llamarlo de esa manera. Fue demasiado corto, algo sin importancia, un error que no debí cometer.

Me sentí un poco mal, repitiendo casi las mismas palabras que Eliam había utilizado.

—¿Estáis segura?—su voz sonó curiosa.

—¿Por qué preguntas si tengo algo con él?—le respondí con otra pregunta, sinceramente no quería responder lo que me había preguntado.

—Eliam se refiere a vos como si le pertenecieras, como si nadie pudiera mirarte o hablarte.

Pestañeé sorprendida.

¡Qué noticia tan interesante!

Y con lo mucho que me gustaban a mí los hombres posesivos y dominantes.

Mis palabras se podrían malinterpretar un poco, los hombres dominantes me fascinaban, pero no aquellos hombres que pretenden no dejarte ni siquiera salir a la esquina o utilizar la ropa que quieras. Ese tipo de hombres me fastidiaban por completo. Me encantaban más los que se decían dominantes por el hecho de que le interesabas tanto que te lo hacían saber por completo. No hasta el punto de tener que hacerte daño o hacerte sentir insegura.

—No tengo nada con Eliam—le dejé en claro—. Solo fue algo que quedó en el pasado.

—¿Y vos lo amáis?

Sentí que mi corazón se sobresaltó dentro de mi pecho. Claro que amaba a Eliam, pero no quería decirlo. No quería decírselo a él.

—¡Buenas buenas!—saludó Massiel ingresando a la casa.

El corazón me regresó a su sitio. Esa chica había salvado mi vida.

—¡Hola mi niña!—le devolví el saludo al mismo tiempo que me levantaba lo más rápido que podía del mueble—. ¿Me acompañas a la cocina a buscar algo que necesito?

Tanto Massiel como Eiden me observaron desconcertados, mirándome como si estuviese loca. Y en realidad lo estaba, nunca iba a avergonzarme por ello. La locura es algo que nos hace sentir vivos por completo.

—Bueno, vamos.

Le dediqué una sonrisa y la tomé de la mano para llevármela conmigo hacia la cocina. Abrí la puerta del lugar y la cerré después que ambas estuvimos dentro. Massiel tomó asiento frente a una de las mesas y me observó a la cara, un poco pensativa.

Mi perfecta melodía, (BORRADOR)Where stories live. Discover now