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Tan pronto como Hye Sudong regresó a la casa, su teléfono volvió a sonar y, mirando la pantalla, vio el número de Yi Tian. Estaba a punto de responder, pero en ese momento Mu Ran salió de la habitación y rápidamente cortó la llamada. Sin embargo, después de unos segundos, el teléfono volvió a sonar. Hye Sudong le sonrió disculpándose a Mu Ran y salió de la habitación.

- ¿Qué quieres? Preguntó en voz baja.

- ¿Cuando llegues? Preguntó Yi Tian. - Tengo que encontrarme con Mu Ran con Mu Jin.

- ¡Qué otro encuentro! Su tarea ahora es irse a casa y acostarse lo antes posible. Mejor aún, ponte más polvo facial o algo en tu cara. Cuando estés listo, te entregaré Mu Ran con algún pretexto. Quizás cuando te vea se conmoverá y luego te jurará amor eterno ...

Tan pronto como Hye Sudong imaginó la cara de Yi Tian, ​​comenzó a retorcerse de risa.

Yi Chian no estaba de humor para bromear con él, así que simplemente dijo:

"Le pediré a Su Wenyang que conozca a Mu Ran y lo lleve al hospital para un chequeo médico. Llamaré al médico ahora mismo para que pueda examinarlo de inmediato.

Hye Sudong de repente recordó en qué estado se encontraba Mu Ran después del accidente automovilístico, y al escuchar la voz seria de Yi Chian, sintió que no tenía ganas de reír. Avergonzado, rascándose la nariz, respondió:

- Está bien, lo entiendo.

Cuando Hye Sudong regresó, Mu Ran ya había empacado sus cosas. Xiu Ran lo ayudó a cerrar las ventanas y puertas, mientras que Hye Sudong le pidió que se llevara todos sus objetos de valor. Mu Ran revisó todo nuevamente y, después de asegurarse de que todo estaba en orden y que no habría problemas, dejaron a Jinxi y se dirigieron al aeropuerto de la ciudad.

Mu Jin había volado en un avión por primera vez y ahora estaba asustada y muy nerviosa. Cuando el avión despegó, ella comenzó a vomitar y estuvo a punto de vomitar. Mu Ran la abrazó y la calmó durante mucho tiempo hasta que se quedó dormida en sus brazos.

Cuando el avión descendió, Mu Ran estaba preocupado de que le dolieran los oídos a la niña, por lo que tuvo que despertarla, darle agua para beber y darle frutos secos para masticar. Mu Zin estaba bien, pero todavía estaba de mal humor y parecía deprimida.

Al salir del avión, vieron a Su Wenyang esperándolos cerca del automóvil. Hye Sudong y Xiu Ran tenían sus propios asuntos, por lo que no fueron con ellos al hospital. Mu Ran se despidió de ellos, metió a Mu Jin en el auto y se sentó, luego de lo cual inmediatamente preguntó preocupado:

- ¿Cómo está Yi Tian ahora?

Su Wenyang, mirando fijamente el camino frente a él, respondió con calma:

MUTEDWhere stories live. Discover now