Quiero que salgas ya de mi mente, porque todo me recuerda a ti, aunque sea una mísera canción, un simple número... Pero vuelves otra vez. Vuelves cada día a mí, a mi mente, y no me gusta nada, porque ya te había olvidado.
Se suponía que te había olvidado.
Pero ya veo que no. Ya veo que me despisto y te vuelvo a ver junto a mí, acompañado de cada pinchazo que siento en el corazón cuando te recuerdo: cada vez peor, cada vez más doloroso.
Sólo quiero pedirte que desaparezcas de una vez, porque me haces daño aun en la distancia y el recuerdo.
Y ¿sabes qué? Cuando te volví a ver, me dije: “No volverá a pasar. Lo nuestro es historia”. Pero no; era mentira. Aunque, en parte, realmente no fue eso. Fue más.
ESTÁS LEYENDO
Memorias de un corazón.
Short StoryBienvenidos al lugar más profundo de mi mente. Porque, si estáis aquí, supongo que será porque sentís que vuestro corazón tiene recuerdos, que cada pulsación no solo hace que la sangre recorra vuestro cuerpo, sino que tiene algo más. Y también supo...