Si te vas, no vuelvas.
No vuelvas aquí, a mi lado, e intentes tocar de nuevo mi corazón, ese que ahora mismo estás rompiendo. No pienso dejarte que lo hagas, o tal vez sí, aunque acabe peor que ahora. Pero esa ya sería decisión mía.
Así que vete, que es lo que quieres.
Márchate por donde viniste aquel día o aquella noche de verano en la que comenzó todo. Lárgate como si fuera entonces, aunque ahora llueva. Porque, no te asustes; son las lágrimas que desprenden mis ojos.
Intenta poner un pie fuera de aquí, de mi vida, y te aseguro que no me voy a volver a cruzar contigo nunca. Y tampoco conmigo, ni siquiera en el reflejo del espejo.
Así que hazlo de una vez. Sin amenazas ni sentimientos. Pero rompe todas aquellas promesas que hiciste y desmigaja un poco más mi corazón antes de que te marches. Entonces, y solo entonces, será cuando nuestros caminos no se vuelvan a cruzar y cada uno tome un sendero diferente.
Y es que, si te vas, no vuelvas. Aunque te necesite. Simplemente, vete. Y procura que no te vuelva a ver un pelo.
ESTÁS LEYENDO
Memorias de un corazón.
Short StoryBienvenidos al lugar más profundo de mi mente. Porque, si estáis aquí, supongo que será porque sentís que vuestro corazón tiene recuerdos, que cada pulsación no solo hace que la sangre recorra vuestro cuerpo, sino que tiene algo más. Y también supo...