Un lobo con corazón de cristal (En edición)

Capítulo 31: "El refugio"

Al día siguiente Irslan se despertó, aunque él dormía las horas y el cansancio eran superiores, un tanto perezoso se levantó de la cama, y observó a Ana acostada a su lado, cuando este decidió marcharse ella abrió los ojos y le dijo:

-No te vayas, Irslan por favor, no me vuelvas a dejar sola...

-Ana, siento haberte preocupado, de verdad, lo siento, pero tengo asuntos que arreglar

-Vas a conseguir que te maten un día de estos

-Bueno, lo que tenga que ser será, pero Jason no puede andar por ahí suelto dañando a la gente, espero que lo entiendas...

En ese momento ella le abrazó, Irslan se quedó congelado, tomó aire, y le dijo:

-Ana, te quiero mucho, pero no quiero ponerte en peligro, te aprecio demasiado y no soportaría ver que te pasase algo

-Si es lo que quieres me quedaré al margen

Irslan le dio un abrazo y un beso en la frente, y acariciando su mejilla le dijo:

-Gracias Ana

Acto seguido se marchó, cerró la puerta tras de sí. "No puedo involucrar a Ana en esto, si le pasase algo... Jason es demasiado peligroso, y cuando le encuentre..."

Cerró el puño, el cual guardaba rabia y a la vez miedo por lo que pudiese pasar, cogió todos aquellos sentimientos y golpeó la pared con fuerza, notó una mirada que se le clavaba en la nuca, y decidió girarse, allí estaba Sandra observándole:

-¿Te pasa algo?

-No ¿Por qué lo dices?

-No es muy normal pegarle golpes a la pared

-Ya... ¿Querías algo?

-Ya veo que no quieres hablar de ello, bueno quería decirte que ahora que vas a estar por tu cuenta ha llegado la hora de que sepas donde viven los lobos.

-¿Cómo?

-Solo sígueme, verás contra lo que habéis estado pelando los humanos todo este tiempo.

-Voy detrás de tí

Hicieron una larga caminata, hasta que al final Sandra se detuvo delante de una alcantarilla, y ella dijo:

-Es aquí, baja

-¿Me estás tomando el pelo?

Ella le miró como si bajar por las alcantarillas fuese normal, y viendo el careto de Irslan le dijo con una pequeña sonrisa:

-Si quieres bajo yo primero

-Em... Que conste que bajo yo primero porque no me dan asco las ratas ni nada parecido, que conste.

-Deacuerdo-Dijo con una pequeña carcajada-Tú primero

Irslan bajó por la alcantarilla, tras unos breves segundos Sandra bajó también, y comenzaron a andar por aquel lugar, ella iba por delante, guiando a Irslan, poco a poco el panorama cambiaba, ya no parecían tanto alcantarillas, más bien unas pequeñas habitaciones, en una de ellas había una mujer al lado de un niño que estaba tumbado en una cama "Tal vez está enfermo o algo así, y esa mujer sea su madre".

Siguieron caminando, Irslan no sabía el destino, pero Sandra continuaba andando sin detenerse, hasta que un hombre se cruzó en su camino, y les dice:

-Lo siento mucho, pero ya no hay espacio para más gente.

Entonces a Sandra le entró un enfado enorme y se puso a discutir con el hombre, Irslan no entendía la situación, pero vio que Sandra se transformó en lobo, y el hombre también, levantó la mano para golpear a Sandra, pero Irslan se puso delante de ella, y se llevó el golpe, al que Irslan respondió transformándose en lobo, Sandra hizo lo propio, pero se escondió debajo de Irslan, Irslan se quedó muy sorprendido por aquella actitud tan extraña:

 "Este tío debe de ser muy fuerte, tengo que estar preparado para lo que sea" Entonces aquel hombre le sacó de sus pensamientos diciendo:

-No sabía que érais pareja, os dejo una habitación, es lo único que puedo hacer...

Irslan se quedó perplejo ante aquella situación tan subrealista, pero siguió a aquel hombre que les guió hasta su habitación, una vez solos Irslan le pregunto un poco confuso a Sandra:

-¿Alguna idea de porque ese hombre dice que somos pareja?

-¿No lo somos?

-¿Qué? No me marees, por favor...

-Bueno, tal vez lo dice porque cuando dos lobos se pelean la loba le protege la garganta a su pareja, y eso es lo que yo hice ahí.

-Entonces...¿Somos pareja?

Aquella pregunta se quedó en el aire, Irslan al no obtener respuesta le dijo:

-Voy a dar una vuelta por aquí, volveré pronto.

Al salir de allí se encontró con un hombre bastante fuerte, se le veía grandullón, incluso daba algo de miedo, pero en sus ojos se veía que era buena persona, este se acercó a Irslan, y con una amplia sonrisa y un buen palmetazo en la espalda le dijo a todo volumen:

-¡He oído que había llegado un nuevo y he dicho vamos a saludar¡ ¿Qué tal? Me llamo William, encantado

-Pues estaba bien, pero ese golpe tuyo me ha descolocado la espalda la verdad, me llamo Irslan, mucho gusto.

Ante aquel comentario William no pudo evitar soltar una gran carcajada mientras no paraba de darle más golpes a Irslan:

-Eres la bomba Irslan

Aquella agradable y amistosa conversación fué interrumpida por un misterioso tercer miembro:

-Ah, caballeros, disculpen mi intromisión en esta agradable charla, pero sentí la necesidad de presentarme, mi nombre es...

-¡Anda! ¡Pero si es Shane Levesque!

-Enfin... Antes de que este patán me interrumpiese, mi nombre es Shane Levesque, y usted debe de ser Irslan, es un honor tenerle aquí.

-Diría lo mismo si supiese algo de tí, quiero decir... de usted, señor Levesque.

-Por favor, llámame Shane

-Está bien Shane ¿Qué se te ofrece?

-Nada en especial y todo a la vez, la vida es tan efímera...

-Ve al grano anda...

-Ah, un hombre que aprecia su tiempo es un hombre que se hace respetar, bien, como no quiero hacerle perder el tiempo seré breve, tome con unos 500.000 ¿Será suficiente?

-¿Suficiente para qué?

-Trabajar para mí, esas cosas...

-No estoy a la venta, gracias

-Todos tenemos un precio amigo mío

-Yo... Tengo un precio, pero dudo que usted pueda entender algo que no sea dinero.

En ese momento una mujer se acercó al grupo y miró a William algo preocupada:

-William, el niño quiere verte, tiene fiebre y no se si podremos conseguir las medicinas que necesitamos...

-Cariño, no hablemos de esto aquí, voy a ver al niño, un placer Irslan, señor Levesque si me disculpa...

-Parte pequeño William, tu familia te necesita

-Me parece increíble que tenga el dinero para ayudarle y no lo haga

-¿Y que ganaría yo con eso?

-Mire, no quiero seguir hablando con usted, ahora, si me disculpa me marcho a mi habitación, hasta luego.

-Pase una agradable noche Irslan, espero ansioso otro encuentro con usted.