13-Déjate de tonterias

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*Dalia*

-Como lo has conseguido?-le pregunté a aurora sorprendida mientras cogía el trofeo en mis manos dándome cuenta que estaba exactamente igual que antes de romperse.

-Te dije que Javi podía ayudarnos con esto-me dijo y yo sonreí.

-Tengo que darle las gracias cuando le vea, de verdad que me sentía muy mal por haberlo roto-dije haciendo una mueca y volviéndolo a meter en la bolsa para dárselo, pero ella me hizo una mueca.

-Porque me lo das a mi?-me preguntó.

-Para que se lo des a tu hermano-le dije obvia.

-Ah nono, esto ha sido cosa tuya que eres la que guardo las piezas rotas, tu eres quien se lo tiene que dar-me dijo sonriendo y yo miré la bolsa de nuevo mientras asentía uniendome a su sonrisa.

                              ******

-Puedo pasar?-pregunté tocando a la puerta con los nudillos y pablo sonrió en mi dirección mientras se quitaba el casco de un oído y asentia con el mando de la play en la mano.

-Chavales, me retiro, luego me conecto-dijo encendiendo el micro para después silenciarlo de nuevo y quitarse los cascos mientras andaba hasta mi.

Estaba sin camiseta y con un pantalón de fútbol, vino hasta mi y cerro la puerta después de invitarme a pasar.

-Me echabas de menos?-me preguntó con una sonrisa y yo rodé los ojos a lo que él sonrió.

-No-Le dije sería y el espero que siguiese hablando-venía a darte esto-le tendí la bolsa que llevaba en mis manos y el frunció el ceño cogiendola, para después mirarme.

-Yo no te he comprado nada-me dijo y yo le di en el brazo mientras el soltaba una carcajada y yo también.

-Déjate de tonterías-le dije y el asintió mientras andaba hasta la cama y se sentó en ella.

Abrió la bolsa, y sacó el trofeo el cual miró detenidamente sin esperarselo y como comprobando que fuese el suyo.

-Como lo has arreglado?-preguntó con una sonrisa y yo sonreí encogiendome de hombros.

-Magia-le dije encogiendome de hombros y el sonrió levantándose dejando el trofeo en la mesa del escritorio para andar hasta mi y coger mi cintura para pegarme a él.

Sonreí pegada a él mientras ya sentía el cosquilleo que el provocaba en mi estómago cada vez que me tocaba, y entonces pegó su frente a la mía.

-Gracias, era muy importante para mi-me dijo sintiendo su aliento chocar contra el mío.

-No me las des, yo lo rompí-le dije.

-Aún así, te has molestado en arreglarlo cuando lo más fácil hubiese sido desentenderte, y más después de lo que te dije.

Sus palabras volvieron a mi mente, "si, con tu sueldo de ejecutiva" e instintivamente me separé de él y la sonrisa se me borró.

-Siento lo que te dije Dalia, no estuvo bien-me dijo volviendo a acercarse a mi.

-No tiene importancia-le dije dándole la espalda y él me abrazó por detrás.

-Si la tiene porque sino no te hubieses separado de mi ahora-me dijo y yo suspiré.

Me giró y agarró mis mejillas para mirarme directamente a los ojos.

-Lo siento de verdad, no quería hacerte sentir mal-me dijo y yo asentí-ahora tendré que darte algo a cambio del regalo-me dijo y yo reí negando.

-No tienes que darme nada-le aseguré y el sonrió.

Acarició mis mejillas con sus pulgares, e inclino la cabeza juntando nuestros labios, como llevaba haciendo días atrás, llevé mis manos a su cintura notando su piel desnuda al estar sin camiseta y mi piel se erizó cuando el llevó sus manos a la mía.

Andamos entre besos hasta su cama, donde me tumbó poniéndose encima de mi sin despegarse de mis labios, y acarició mi muslo con su mano derecha hasta posarla en mi culo.

No conseguí apartarme, todo lo contrario, los brazos de Pablo me tenían atrapada y yo tampoco me había molestado en apartarlos en ningún momento, estaba siguiendo el consejo de leire, estaba disfrutando de el y dejándome llevar.

-Dalia hija, puedes bajar un momento?-se escuchó desde abajo a leonor y rápidamente aparté a pablo de mi para salir por la habitación.

*Gavi*

Se fue y me quedé bocarriba en la cama mientras soltaba un suspiro, mi mirada se dirigió al trofeo que yo mismo había dejado en el escritorio y lo cogí con mis manos mientras una sonrisa se me dibujó sola.

Era la primera vez en mucho tiempo que una chica se molestaba tanto en hacer algo por mi, y más después de como la traté, y más después de...bueno. Eso ella realmente no lo sabía.

Estuve un rato más en mi habitación pero sin hacer nada en especial, y no fue hasta la hora de la cena que baje a la cocina donde hablaba ella con leonor y mi madre, y me fije en su sonrisa cuando hablaba con ellas desde el marco de la puerta.

Era una chica inocente eso estaba claro, no sabía cual era el motivo que la tenía trabajando aquí, cuando se veía que era lista de lejos y podía aspirar a mucho más.

-Hijo, que haces ahí parado?-me preguntó leonor sacándome del trance y yo sacudí mi cabeza para entrar con ellas.

-Tengo muchísima hambre-dije-venía a saber cuanto le quedaba a la cena-dije rascando mi nuca.

-En un cuarto de hora estará, no te preocupes-me dijo mi madre y yo asentí, quedándome parado mientras las dos mayores tenían sus ojos posados en mi.

-Vale-dije abriendo la nevera y cogiendo un poco de agua.

Dalia salió con los cubiertos, supongo que a preparar la mesa y la segui con la mirada hasta que desapareció, y mi madre salió hablando por teléfono, quedándome solo con leonor que me miraba con una sonrisilla tonta.

-Que?-le pregunté y ella negó la cabeza con una sonrisa en sus labios.

-Nada, gruñón-dijo dándome cariñosamente con el trapo haciéndome reir...

(CONTINUARÁ...)

Estoy un poco en esa fase donde me bloqueo porque tengo muchísimas ideas pero no sé aún cómo ir enlazandolas, Tened paciencia, se vienen capítulos muy top!❤️🫠

MUNDOS OPUESTOS-PABLOGAVIWhere stories live. Discover now