MUNDOS OPUESTOS-PABLOGAVI

80-El niño sabe cosas

*Dalia*

-Estás preciosa-me dijo Gavi antes de bajar del coche dejando un beso en la palma de mi mano y sonreí llena de nervios.

Iba a ver a mi madre, iba a pasar un rato con ella después de que se fuese de casa cuando tenía siete años.

Me bajé del coche y coloqué bien mi vestido, con la calor que hacía y mi cada vez más notable barriguita era lo único que me ponía prácticamente.

Gavi andó hasta mi cogiendo mi mano para entrelazarla y andamos hasta la puerta de su casa. Era una casita mata pequeñita, perfecta para el niño y para ella.

Antes de que pegase al timbre lo frené echándome para atrás y cogí aire.

-No se si deberíamos irnos,pablo-le dije tragando saliva y él frunció el ceño.

-¿Te vas a arrepentir luego?-me preguntó y me encogí de hombros-Mi vida, hacemos lo que tu quieras, pero no quiero que te arrepientas después-me dijo cogiendo mi cara con sus manos y yo asentí nerviosa.

-Vamos, entramos-le dije segura y el asintió dejando un pico en mis labios antes de pegar al timbre y entrelazar nuestras manos.

A los pocos segundos nos abrió mi madre con una sonrisa de oreja a oreja.

-Hola, pasad por favor-dijo y se echó a un lado para que pasáramos.

La casa era bonita por dentro, pequeñita pero acogedora.

-¡Dylan ha llegado tu hermana!-Gritó haciendo que me sobresaltase-no quería asustarte, es que está con la play y no se entera-me dijo riendo y yo le quité importancia.

-No pasa nada, él es Pablo, es mi novio-le dije y mi pablo educadamente le dió dos besos.

-Muy guapo-me dijo con una sonrisa y yo asentí sonriendo.

El pequeño salió de su habitación con cara de pocos amigos, hasta que vió a Gavi parado frente a mi.

-¡Gavi!-gritó corriendo hasta él, mi novio lo cogió prácticamente al vuelo y reí al ver su reacción.

Resultó ser que mi hermanito era un amante del fútbol, como pude comprobar el día que lo vi con su balón en el parque.

Mi madre no sabia que Gavi era famoso, pero el pequeñín se encargó de explicárselo mientras iba a por su balón para que se lo firmase Pablo.

-Jolín no tengo ninguna camiseta, ¿pero cuando la tenga me la firmarás?-le preguntó mientras le firmaba el balón.

-Pues claro, es más, otro día vamos a ir tú y yo a comprarte la camiseta que más te guste-le dijo dejando un toquecito en su nariz haciéndolo sonreír.

-A mi me gusta mucho como juegas, y también Araujo-le dijo tímido y Gavi acarició su pelo revolviendoselo.

-Después de comer podemos echar un partidillo tu y yo, ¿te apetece?-le ofreció y los ojos del pequeño se iluminaron.

-Sisisi-le dijo y después buscó permiso en los ojos de mamá, que asintió.

-Ahora sentaros que vamos a comer-les dijo mi madre a ambos. El pequeño se sentó y Gavi y yo nos ofrecimos a ayudar, pero se negó en rotundo a que la ayudaramos.

Comimos un poco hablando de todo, el pequeño estaba muy hablador ahora y no solo con pablo, también conmigo.

-Me gusta saber que tengo una hermana mayor-me dijo y sonreí-así no solo somos mamá y yo, bueno y a veces s...-mi madre lo cortó pidiéndole que la acompañara a sacar el postre.

Ese gesto no pasó de sapercibido para Gavi, ni mucho menos para mí.

-Escuchame, voy a llevarme al niño al parque para que hables con ella con tranquilidad-yo asentí-voy a tener el teléfono en la mano y estoy a dos minutos, me llamas con lo que sea-yo asentí de nuevo y el acarició mi muslo acercándose a mi.