44-Estamos solos

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*Dalia*

La tía de Pablo fue la primera en llegar sobre las doce de la mañana, me quedé un poco cortada al principio, pero pronto ellos se encargaron de que como siempre estuviese cómoda.

El que no estaba conmigo esta vez era pablo, porque sus primos pequeños Aroa y Raúl lo habían raptado para jugar con el, y no había parado de estar con ellos de un lado para otro contentando a los pequeños.

-y cuando empiezas las clases-me preguntó belén.

-La semana que viene-le dije con una sonrisa-al solo haber perdido dos meses y medio me van a dejar seguir con mi curso aunque tengo que ponerme al día.

-No hace falta que te diga que te ayudo en lo que necesites-me dijo Aurora.

-Muchas gracias-le agradecí, al fin y al cabo ella estaba estudiando lo mismo que yo y solo me llevaba un año de diferencia.

-Un segundo, bebo agua y voy con vosotros-dijo Pablo entrando a la cocina ahogado.

-Mucho fútbol pero te cogen los enanos y te destrozan-le picó aurora y yo reí.

-¿Sabéis la energía que tienen estos niños?-preguntó mirándonos mientras bebía agua y su tía rió.

-Pues claro, son mis hijos-le dijo obvia Almudena.

Su prima se acercó a mi, no tendría más de cinco años y me miró con el ceño fruncido.

-¿Me haces una trenza como la tuya?-me pidió y yo asentí.

Llevaba una trenza de espiga, asique cogí su pelo haciéndole una trenza, y cuando acabé fue hasta las piernas de su primo mirándolo.

-¿Que pasa enana?

-¿Volvemos a jugar?-le preguntó ella.

El no le contestó, pero la cogió poniéndola en su espalda como un saco de patatas haciéndola reír a la vez que sonaba el timbre.

-Deben ser los abuelos, yo abro-dijo pablo con la niña en su espalda.

-No lo dejan quieto cada vez que lo ven-me dijo Belén refiriendose a Gavi y los niños, y yo mordí mi labio sonriendo viendo la escena de los niños colgados de él mientras iba a la puerta.

Una pareja de lo más entrañable entró en la cocina, eran los padres de belén, y todos los fueron saludando hasta que solo quedé yo.

Pablo se acercó hasta mi cogiendo mi mano acercándonos a ellos y sonreí a la pareja.

-Abuelos, ella es Dalia, mi novia-les dijo pablo.

-Encantada-dije sonriendo.

-Anda que no eres tu listo-le dijo su abuelo después de darme dos besos-te la has buscado fea, si-dijo con ironía y yo reí sonrojada.

-Madre mia si yo sabía que iba a conocer a la novia de mi niño habría llegado antes-dijo ella cogiendo mi brazo con una sonrisa-¿Cómo estás guapa? Yo soy Aurora.

Brazo que no soltó en toda la tarde, que se convirtió en una panzada de preguntas hacia mi, aunque no me molestaban, porque sabía que tenían interés en conocerme y que para todas que Pablo se echase novia era algo que no se esperaban.

Pablo siguió jugando con el niño hasta que se durmió, sin embargo Aroa no se despegó de mi después de lo de la trenza.

-Es la primera vez que habla tanto con alguien-me dijo Almudena cuando la niña fue a buscar uno de sus muñecos para enseñarmelos-es muy tímida con todo el mundo.

-Eso tienen las dos en común-dijo pablo sentándose a mi lado y yo sonreí asintiendo.

-A mi me has parecido un encanto-dijo su tía y yo le sonreí tímida.

MUNDOS OPUESTOS-PABLOGAVIWhere stories live. Discover now