Hawa: Debemos salir a flote | #2 |

Capítulo 25 (Parte 1/2)

Cierro la puerta de la furgoneta y entonces Ashley me saluda secamente. Oigo las ruedas rechinar detrás de mí cuando el vehículo sale del estacionamiento, pero yo me quedo mirando fijamente hacia la escuela. He estado bastante desactualizada con el instituto, y obtengo las consecuencias que debo tener. Cuando entro a la primera clase del día, el profesor me anuncia que mis notas dan qué esperar. Dicho más literal: que son pésimas. Que está decepcionado. Y no es el único maestro que me dice algo parecido en toda la mañana. En clase de Biología observo cómo se devuelven los trabajos y tareas que, al parecer, todos en el aula han entregado, menos yo.

Cuando salgo a los pasillos, todas las paredes están decoradas y los carteles están pegados hasta en los casilleros. El baile de graduación se acerca y todo el mundo está emocionado por ello, excepto yo, que recién lo recuerdo cuando noto todos los decorativos. Ebby siempre soñó con ser una de las organizadoras; con preparar el salón, elegir los colores, los centros de mesa, la cena. Mientras más avanzo por los pasillos, me doy cuenta de que el puesto donde Mia Moore repartía volantes sigue intacto.

Yo ni siquiera tengo el vestido, y aún así logro escuchar los comentarios de todas las chicas. Aquella quiere un vestido verde para resaltar, la otra decide algo más tradicional y se lo hará rojo. Una se juega con el negro, mezclándolo con algún otro color. Incluso hablan de los peinados, de los zapatos, del maquillaje, de los accesorios, y hasta del perfume que se pondrán.

Frunzo el entrecejo y, por alguna razón, siento que estoy copiando lo que Ashley haría en esta situación. Aflojo mi expresión y me recompongo; no debería darle tanta atención a lo que dicen las demás chicas... pero sí debería concentrarme en el baile si no quiero llegar esa noche en jeans y zapatillas.

Y, si no quiero entrar sola, debería ponerme en la búsqueda de un acompañante.

Me dirijo hacia la última clase del día viendo a todos los muchachos que se pasean por la escuela. De verdad no tengo ni idea de quién querría ir conmigo. No conozco muchos chicos de por aquí, y apenas hablo con los que comparten clases conmigo. Además, para ahora, ya todos estarán ocupados y tendrán su propia pareja.

La idea del baile se disuelve y me encuentro pensando en cuándo iremos al bosque en busca el hawa al que vi. La Iniciación pasó —por suerte— y ahora sólo hay que esperar a que se celebre esa festividad que me comentaron, la que le da una mejor bienvenida a quienes pasaron la primera prueba. Cuando eso ocurra, Elliot y tal vez Danna nos encubrirán y excusarán mientras Fénix, Ash, Jota, Marshall y yo nos escabullimos hacia la cabaña.

Tan sólo deseo que el hawa tenga información suficiente sobre qué les pasó a mi padre y a los de Fénix, si es que el Círculo estuvo involucrado en ello. O, al menos, si conoce al tal Xander.

La puerta del aula está abierta, y el profesor está sentado en el escritorio mientras ojea su celular. Cuando me volteo hacia un pupitre, me percato de que Ebby está en la clase, casi al final del aula. Sonrío y levanto la mano, saludándola. Pero, en vez de devolverme el gesto, sigue con el rostro serio y aparta la mirada hacia otra parte.

Me quedo bajando la mano lentamente cuando el maestro anuncia que ya comenzamos. Me siento en mi lugar, mientras una horrible sensación me aprieta la garganta. ¿Por qué me ha mirado así? ¿Que no habíamos resuelto nuestros problemas? ¿Que no todo había vuelto a ser, al menos, un poco más normal entre nosotras?

Me atrevo a observarla por sobre mi hombro, mientras la voz del profesor provoca el silencio en la habitación. No me ve. Se nota que se esfuerza por ver hacia el frente, como si alguna vez haya prestado atención a la clase. Después de un rato baja la mirada hacia su celular, y entonces me obligo a prestarle atención a mi cuaderno.