Prólogo.

61.4K 3.9K 1.4K
                                    

Redes sociales para información y contenido extra: Instagram: hcandela_   Twitter: isnotcandy .

Lo que tenes que saber antes de leer:

La novela aborda temas como la salud mental, trastornos de ansiedad, depresión, adicciones, trastornos alimenticios y escenas +18.


Un año atrás.

—Vamos, bebé —me insiste Zack. Coloca sus manos sobre mi cintura y tira de mí, haciendo que mi espalda choque con su pecho. Ladeo mi cabeza y niego.

—Nos quedemos un rato más —le pido poniendo un puchero y volteo a mirarlo. Conozco a mi novio bastante bien. Tanto como para saber que si lo miro a los ojos y finjo un rostro con un perfecto puchero, voy a conseguir lo que quiero.

Además, la noche es bastante joven. Bueno, no sé si tan joven. Pero vamos, son las cinco de la mañana y es verano, ¿qué nos impide quedarnos?

Zack luce inquieto. Voltea a mirar a sus costados como si estuviera chequeando que nadie nos estuviera siguiendo. Entrecierro mis ojos. Ahí está otra vez esa expresión paranoica. Se ha estado comportando extraño desde que llegamos al club.

—¿Está todo bien? —inquiero frunciendo el ceño. Coloco mis manos en los costados de su rostro y lo obligo a mirarme. Esos potentes ojos azules que hicieron que estuviera a sus pies desde el primer momento, me devuelven la mirada. Hace su mejor esfuerzo para ocultar su preocupación. Esboza una sonrisa y acorta la distancia entre nosotros para besar mi frente.

Algo no va bien.

—Nos quedemos un rato más —accede Zack antes de que pudiera decirle algo más sobre su extraño comportamiento. No suele ser así, él es más de ir con lo que suceda en el momento, sonreír siempre y estar relajado. Y ahora está nervioso. ¿Por qué estarlo? Es el mismo club de siempre, con la misma gente de siempre y la misma música de siempre.

—Zack, espera —me pongo firme cuando intenta llevarme a bailar—. ¿Qué te sucede? Estás raro.

—No, no lo estoy —me asegura él. Se alza de hombros en un intento para quitarle importancia.

—Sí, sí lo estás —suelto su mano.

Un par de teorías sobre la situación comienzan a pasar por mi cabeza. ¿Será qué...? No, no. Pero... ¿Es posible que Zack me haya engañado y la chica con quien lo hizo está justo en este lugar? Sé que es una idea muy rebuscada pero... Mi relación con Zack solo tiene tres meses, sigue habiendo veces en la que no me siento segura. Es mi primer novio y tengo un miedo irracional a estropearlo todo.

—Quinn, está todo bien —me mira a los ojos para convencerme.

Me inflo de aire y muerdo mi labio. Tiene razón, está todo bien. Me preocupo demasiado, debería relajarme más. Seguro que no es nada.

Entrelazo nuestras manos y tiro de él para que vayamos a la pista. Es tarde pero eso no impide que la gente siga saltando, moviendo sus cuerpos sudorosos, gritando y disfrutando de estar bajo los efectos del alcohol.

Aparento que todo está bien y que no me encuentro preocupada por el comportamiento de Zack. Salto y hago girar a Zack moviendo mi cuerpo al ritmo de el DJ. Él aprovecha que mi humor está por las nubes y me aferra a él. Me dice en el oído lo afortunado de es de tenerme consigo y mi cuerpo entero cosquillea. Me río y lo abrazo.

De repente, rompe el abrazo bruscamente. Retrocede un paso sin soltarme la mano. Me inclino un poco y logro ver a un hombre. Luce de la edad de Zack, quizás un poco más. Tiene tez oscura y una complexión grande, es incluso más alto que Zack y encontrar a alguien así es difícil. Viste unos vaqueros negros y una camiseta del mismo color.

The Same Heartbreaker (2) ✔️Where stories live. Discover now