Prohibido Enamorarse de Adam Walker - Lia Belikov

8.7K 91 9
                                    

▪ -Yo no necesito de trucos baratos para impresionar a una chica -habló en mi
oído-. Tampoco necesito ayuda de osos de peluche para reclamarla como mía... Simplemente se lo digo y punto. Mis rodillas comenzaban a debilitarse, toda la armadura que cargaba parecía aflojarse ante las cosas que me estaba diciendo.
Intenté zafarme de su agarre pero no me dejó ir. En un movimiento arrebatado pegó mi frente contra la suya, y me obligó a verlo a los ojos.
Un huracán se estaba formando en su interior, y en el mío se desataba un tornado.
-Y si quiero besarte, Anna -susurró contra mis labios-, no espero a que tú hagas el primer movimiento. Simplemente me lanzo

▪ el amor golpeará a tu puerta cuando menos te lo esperes

▪ -Anna... Sé que soy un completo idiota y que probablemente no necesitas que te diga esto pero... -se detuvo un momento para hipar -Nunca, jamás, ni en tus
sueños más oscuros, te vayas a enamorar de un tonto como yo. Estoy arruinado, te lo digo.

▪ -Te entiendo. Y sé que me lo merezco. Pero te pido que me des una oportunidad, sólo una para demostrarte que este "sobrante" puede llegar a valer la pena

▪ -Lo que quiero decir es que probablemente seré tu ruina, lo peor que te haya pasado; soy como un virus ébola multiplicado por cien, pero Anna, estoy completamente seguro que no tenerte cerca, ni por un segundo al día, hace que mi piel deje de sentir. Sé que suena estúpido y cursi pero te quiero sólo para mi

▪ -No creo que pueda
soportar a otro imbécil babeando por tu cuello. Sonreí de lado.
-¿Entonces me estás diciendo que tú quieres ser el único imbécil que babee por mí?
-Exactamente

▪ -Los finales perfectos están sobrevalorados -dije después de unos segundos, sin pensar en otra cosa que decir.
Me sonrió sin tanta emoción como suele poner en sus sonrisas.
-Los finales perfectos venden libros, Anna.
-La gente compra libros para escapar de su propia realidad no tan perfecta, Adam.

▪ -Anna -dijo Adam aun sonriendo-, entiende que, para mí, todas tus imperfecciones son hermosas.

▪ Lo que más temía era que, si él era un edificio a punto de colisionar, no sabría si yo estaría preparada para salirme justo a tiempo antes de que todo se viniera abajo.

▪ ¿Cómo puede gustarte alguien e ignorar su lado dañado? No puedes Lo aceptas, lo ayudas y lo vives con él.

▪ Sin importar lo que muchas de esas frases genéricas dijeran acerca de olvidar y perdonar, dolía demasiado como para hacerlo en este momento

▪ Era mejor vivir en la ignorancia de la mentira que abrir los ojos ante el conocimiento de la verdad.

▪ Había escuchado antes esa
frase: Eres fácil de amar. Pero nunca había entendido su significado

▪ Te extraño, nena. Por favor di que me perdonas y te prometo que dejaré de ser un idiota... Te prometo la luna... ¿Las estrellas? Aggg, no soy bueno tratando de ser romántico, tenerte en persona hace que mis palabras salgan espontáneamente.
PD: me estás matando!! Me estoy quemando a fuego lento!!

▪ -Si hacer que beses a todos los hombres del mundo hará que me perdones... pues te dejaré hacerlo

▪ Era mejor no enamorarse, se sufría menos

▪ Te dije, desde antes, que conmigo no hay finales felices.
-Y yo recuerdo decirte que los finales felices están sobrevalorados.
-¿Quién no querría un final feliz, Anna?
-Para empezar -le dije- nadie quiere un final

▪ deja de decir que no eres el indicado para mí y comienza a trabajar para serlo.

▪ -Puede que no te hayas dado cuenta todavía -dije con voz firme para que le quedara claro- pero tú tienes el control absoluto y completo de todo lo que soy. Nunca fui un chico celoso, hasta que te conocí. Nunca le conté a nadie sobre mi familia, pero contigo rompí el silencio. Y jamás necesité a alguien como te necesito a cada momento.

▪ Es imposible que vuelva a sentirme como una sola unidad nunca más, así como es imposible que vuelva a funcionar sin ti

▪ -Lamento decírtelo pero es cierto. Si supieras quien es Adam Walker no estarías tan tranquila, sentada a mi lado -Sé quién es Adam Walker. Es la persona tierna y amorosa que me hizo el amor lenta y deliciosamente hace unas horas. Es el chico de celos adorables y actitud protectora que detuvo sus impulsos solo para ponerse un condón. Eres ese Adam que mataría al que mirara mal a tu sobrina, y que amas incondicionalmente a tu abuela.
¿Qué Adam crees que eres en realidad? Porque yo veo uno diferente al que tú ves, yo veo al real.

▪ Finalmente Adam se abriría a mí y me contaría lo que tanto parecía atormentarlo desde hace años. Pero lo entendía, Christian Grey se tardó quinientas páginas para decirle a Anastasia que su madre consumía crack, y tomó cerca de dos libros contarle la razón del por qué le gustaban las morenas y no las rubias.

▪ Por eso era malo enamorarse de forma tan profunda, uno siempre termina lastimado y con las alas rotas.

▪ -¿Puedes...? -mi voz comenzó a temblar- ¿Puedes hacer algo... algo que haga desaparecer el dolor?¿Algo que evite que vuelva a enamorarme? -Cariño, me temo que enamorarse es tan natural e inevitable como respirar. Es imposible no hacerlo.

▪ -Digas lo que digas, te quedas conmigo hasta que me dejes entrar de nuevo a tu corazón. Sé que no va a ser fácil, pero planeo ganarme de nuevo ese derecho.
-Para dejarte entrar a mi corazón tendrías que poner uno nuevo. ¿No te has puesto a pensar que tal vez tú y yo no estamos destinados a estar juntos?
-Ni por un segundo, nena. Ni por un miserable segundo me ha pasado eso por la cabeza. Vine con un propósito Anna, y ese es el de recuperarte Acéptalo. Si quieres que me ponga de rodillas y me arrastre de aquí a tu casa, entonces lo haré. Nómbralo y lo hago; pero por lo que más quieras, no me digas que tú y yo no estamos destinados a estar juntos. Y si no lo estamos... que se joda el destino porque haré lo que quiera, siempre y cuando sea contigo.

▪ -Lo siento Anna pero es imposible marcharte ahora. No cuando estás más metida dentro de mi piel que todos mis tatuajes juntos. No cuando se me acelera el pulso con sólo la mención de tu nombre -despegó los ojos de la pared para verme a mí directamente, terminando de hablar- y no cuando te amo tanto que duele con cada respiración.

▪-Olvídalo, ya sé que yo no formo parte de tu vida.
-Te equivocas, hermosa. No formas parte de mi pasado pero quiero tenerte para siempre en mi futuro. Hasta que la muerte, o tu papá, nos separe.

Frases de librosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora