¿A quién no le gusta un pequeño alfa dulce?

Capítulo 29: Regalo.

Su Yuzhou se quedó atónito "¿Qué?"

La frase sin cabeza de Su Lan lo confundió, frunció el ceño y pensó cuidadosamente, parece que no se ha metido en ningún problema, ah.

Dijo con dudas: "La semana pasada salió un nuevo juego"

Su Lan resopló y luego dijo: "¿Aparte de eso?"

Esa era una forma desconcertante de hacer preguntas. El nuevo juego salió a la venta la semana pasada, y no era eso, así que no pudo evitar volverse más y más cauteloso.

De repente, en un relámpago, pensó en algo, giró la cabeza y miró en dirección al comedor. Mamá no sabe sobre él y Su Qian, ¿verdad? El corazón de Su Yuzhou se hundió y su mente se quedó en blanco por un tiempo, no podía dejar de pensar... ¿Cómo lo supo ella? ¿Cuánto sabia? Su largo silencio se cambió por un profundo suspiro de Su Lan, luego dijo con severidad:

"Su Yuzhou, Estoy muy decepcionada contigo".

Sus palabras hicieron que Su Yuzhou se sobresaltara, entonces no pudo evitar que se le agriara la nariz.

Aunque no estaba satisfecho con su fuerte carácter, siempre tirando de él en un baño juntos para cultivar una relación con su madre alfa, y no era tan cercana a ella como con papá Su, pero en realidad, en su corazón, tiene una buena opinión de ella.

De niño, para conseguir su aprobación y afecto, Su Yuzhou se ha tomado muy en serio sus estudios, tratando de ser un buen chico que obedece a los ojos de sus padres.

No tiene recuerdos especialmente claros de su vida pasada, pero cada vez que sueña con esas escenas, sentiría la desesperación y el dolor del abandono, así como una profunda duda sobre sí mismo.

Así que, incluso con su confusa percepción de su género ABO, de joven, aprendió a esconderse cuidadosamente, sin atreverse a que sus padres lo conocieran por miedo a que pensaran que era una monstruosidad.

No fue hasta que más tarde recuperó por completo los recuerdos de su vida anterior cuando por fin recobró la fuerza y la amplitud de miras que antes tenía, y sólo entonces tuvo un corazón fuerte que pudo reconciliarse consigo mismo.

Pero ahora, las palabras de Su Lan eran todavía demasiado pesadas para Su Yuzhou.

Estaba disfrutando de su actual relación con Su Qian y no le importaba lo que los demás pensaran de él, pero este "otros" no incluía a su familia.

Estaba un poco abrumado, "Mamá, escucha mi explicación..."

"¡No tienes que explicar!"

Su Lan dijo con decisión: "Siempre pensé que mi hijo era un Alfa responsable, y rara vez interfería en sus decisiones".

"Pero ahora, ¿estás viviendo con otra persona, y todavía nos lo ocultas? No quieres asumir la responsabilidad, ¿verdad? Nuestra familia Su no tiene una persona tan cobarde".

Su Yuzhou: "......"

¿Hmm?

¿Algo no parece estar bien?

"Mamá, yo..."

"¡No hace falta que digas más!" Su Lan dijo en voz alta.

"Cuando se te pase el celo, trae a alguien a casa para comer juntos".

"¿Eh?"

"Ah ¿qué ah? ¡Mocoso, tu padre me lo dijo! Vivir juntos durante el celo, ¡te van a dar una paliza si la familia de alguien se entera!"

Después de ser gritado por ella, Su Yuzhou no pudo evitar alejar un poco su teléfono, pero la sensación de haber sido abandonado hace un momento desapareció por completo.