Así coincidimos || Terminada

Capítulo 26

Pov Calle.

Me encontraba respirando hondo a través de una bolsa de papel para no hiperventilar, miré hacia arriba y una pequeña sonrisa apareció en su rostro, divertida.

Quité la bolsa de papel de mi boca y la apunté con mi dedo índice, amenzante.

— No es gracioso. — Advertí, sonrojándome.

— Oh, vamos, cariño. — Arrojó con una risita burlona. — Es gracioso verte de esta forma. — Añadió apretando los labios para reír.

— Es que, es que-

Volví a inhalar y exhalar con la bolsa de papel, escuchando una risotada por parte de Poché, rodé los ojos intentando calmar mi respiración.

Por suerte Damon se había ido con Lila, la cual se había quedado de chismosa y oculta por algún lugar, pero por chismosa le tocó ser niñera.

¿Y por qué me encontraba respirando con una bolsa de papel?

Bueno, después de que Poché me dijo que si se mudaba con nosotros, me puse tan feliz que no podía borrar mi sonrisa, incluso salté de la alegría, pero cuando me puse a pensar en todo el compromiso que se vendría con eso, sencillamente me faltó el aire.

En términos de soportar no soporté.

Ahora estaba aquí, sentada en el suelo debajo del tipo respirando a través de una bolsa de papel con mi novia, la cual tenía 5 minutos de hacerme burla.

— ¿Ya te sientes mejor?— Inquirió poniéndose de cuclillas y acariciar mi rodilla.

— Siento arruinar la cita con esto. — Expresé con medio puchero, ella negó con su cabeza.

— ¿De qué hablas? Es la mejor cita que he tenido en la vida. — Declaró con naturalidad mientras reía.

— Chistosita. — Murmuré haciéndole una mueca.

Poché rió comiendo un bocadillo, sacudió sus manos y se arrastró por los cojines del tipi para llegar a mi, tomó mi mandíbula y dejó un rápido beso en mis labios.

— De verdad, nadie había hecho esto por mi, gracias. — Confesó acariciando la línea de mi mandíbula con su pulgar.

Bajé la vista totalmente colorada, sin saber que responderle, escuché una risita.

— ¿Y bien? ¿Cómo es qué diste con este lugar?— Cuestionó moviendo sus hombros jocosa, sonreí.

— Milenka me dio cierta información que no sabía de ti. — Dije encogiendome de hombros.

— Mis hermanas son fan de darte datos de cualquier tipo sobre mi, eh. — Soltó resoplando, colocando sus codos en sus rodillas.

— Bueno, eres muy misteriosa y me doy cuenta de las cosas porque soy curiosa y te presto atención. — Declaré tomando una fresa para darle un mordisco.

— ¿Ah sí?— Cuestionó, asentí con mi cabeza. — No te creo.

— Ponme a prueba. — Sugerí con una sonrisa.

Poché quedó pensativa, me observó y alcé una ceja a la espera.

— Si sabes de mi, ¿qué me gusta?— Inquirió, la vi con cara de “¿en serio?” y ella se encogió de hombros.

— Es la peor pregunta de todas. — Repliqué, mi novia rió. — Te gusta todo lo referente al arte, lo sé porque dibujas, escribes tu música y tocas muy bien la guitarra además de cantar. Tú color favorito el azul.

Poché se escondió detrás de las palmas de sus manos tímida y entreabrio sus dedos revelando unos de sus ojos, reí.

— También te gustan las motos, y antes de que preguntes. — Me adelanté al ver que iba a preguntar. — Lo sé porque hablas con emoción cada que le llevas una escala de tal modelo de moto a Damon y juegan.