Capitulo 35

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Nota informativa y agradecimientos varios: Primero que todo la historia no ha terminado aun pero tuve algun que otro problema escribiendo este capitulo y me frustre bastante. Quería agradecer en general a toda persona que lea esta historieta que me vino a la cabeza un dia, cogí un viejo cuaderno y escribí 4 capítulos. Los comparti en el grupo de WhatsApp de Luimelia que creo Ale y recibí un apoyo inmediato por su parte. De no ser por eso esta historia se habría quedado como una anécdota escrita en un viejo cuaderno. Quiero agradecer personalmente a algunas de ese grupo: Esther, Marta, Maria Jose, Ana Isabel, Angie, Deny, Cris ( si me olvido de alguien perdon y decídmelo que os sumo después) por apoyarme desde el principio y animarme a seguir escribiendo. Y particularmente a Marta y a Maria Jose por ayudarme a sacar adelante este capitulo. Después de esta chapa os dejo con el capitulo que mas quebraderos de cabeza me ha dado hasta el momento. Muchas gracias por tomaros el tiempo de leerlo 😚😙😗

Milagro Navideño de 1976
Capitulo 35

LA MAÑANA DEL 28 DE DICIEMBRE DE 1976, HABITACION 206 HOTEL GRAN VIA

Amelia abrió la puerta de la habitación haciendo una reverencia.
AMELIA: Mademoiselle!
Luisita se echó a reír. Amelia se extrañó con la reacción y miró dentro de la habitación. El servicio de limpieza hizo un gran trabajo pero resultaba gracioso ver todas las maletas en fila.

Amelia tiró del vestido de Luisita a la altura de la cintura para meterla en la habitación. Luisita entró, cerró la puerta y se apoyó sobre ella poniendo carita de buena mordiendose el labio.
LUISITA: He hecho algo mal?
Amelia se mordió e labio y se acercó insinuante apoyando su mano derecha en la puerta.
AMELIA: Como me pone cuando pones esa carita de niña buena.
Luisita puso su dedo índice en la boca y lo mordió.
LUISITA: Pero si yo soy buena…
Amelia no aguantó más y se lanzó a su boca besándola apasionadamente mientras Luisita la abrazaba recorriendo sus manos por la espalda hasta llegar a su culo. Lo agarró con firmeza con las dos manos y separó sus labios de los de Amelia.
LUISITA: Dios… como adoro que seas bailarina…
Luisita pasó de niña buena a pantera al tocar el cuerpo atlético de Amelia.
AMELIA: JAJAJA Tranquila pantera… que no hay prisa.
Luisita se giró empotrando bruscamente a Amelia contra la puerta restregando su propio cuerpo contra el de la morena.
LUISITA: Prisa no… pero urgencia ya te digo yo que sí.
Luisita atacó el cuello de Amelia recorriendo sus pechos con las manos para llegar a los molestos botones que evitaban el acceso a su suave pecho. Recorrió su torso de abajo a arriba sobre la blusa para desabrochar ña camisa en su descenso y arrancarla del cuerpo escultural de Amelia con ojos llenos de pasión. Ojos que encendieron el fuego interno de Amelia.
AMELIA: Usted señorita tiene demasiada ropa o me parece a mi?
Amelia la agarró por la cintura, cogió entre sus dientes la cremallera del vestido agachándose para bajarla con un sensual movimiento de cadera mientras que sus manos hacían contacto con la piel del estómago subiendo lentamente hasta sus pechos.
Luisita estaba apoyada sobre el respaldo del sillón cuando…
AMELIA: Chassss
Con un movimiento rápido Amelia se puso de pie mientras sus manos retiraban el vestido de sus hombros dejándolo caer al suelo.
La rubia puso una mano en el pecho de Amelia indicando que se sentase en la mesita de café. Tiró de los rizos hacia atrás besándola mientras se sentaba en su regazo. Volvió a levantarse y restregó sensualmente su bajo vientre en el pecho de Amelia mientras que esta estrujaba sus nalgas a dos manos y besaba su ombligo.
Luisita se agachó posando sus manos sobre el muslo del pantalón corto de Amelia recorriendo su pierna derecha hasta dar con el cierre de su bota blanca. Cogió la bota con las manos para retirarla mientras miraba sensualmente a Amelia. Una vez liberado el pie derecho ascendió dejando suaves besitos a lo largo de la pierna para repetir la acción con la bota izquierda pero esta vez lanzó la bota hacia atrás por encima de su cabeza.
LUISITA: Ups
Luisita hizo el gesto de taparse la boca al decir eso provocando la siguiente reacción de Amelia que mordiéndose el labio se abalanzara sobre Luisita tumbándola en el suelo, poniéndose sobre ella a cuatro patas. Amelia puso su lengua en la barbilla de Luisita recorriendo lentamente  su boca, nariz y frente hasta llegar al nacimiento del pelo. Repitió recorrido en sentido contrario pero esta vez Luisita atrapó la lengua con la boca besándola. Amelia cogió el labio inferior de Luisita al terminar con el beso y siguió con la peregrinación de su lengua hacia el ombligo de la rubia arrastrando sus rizos por su cuerpo. Una vez alcanzado el destino Amelia de deshecho en besitos, lametazos y succiones poniendo a Luisita como una moto silenciando sus gemidos mordiéndose el puño.
Una vez satisfecha Amelia prosiguió su viaje pero esta vez sus manos seria el vehículo y deshacerse de las botas eras su cometido. Amelia recorrió la goma de la braga con las yemas de los dedos para luego descender con sus caricias hasta la cremallera de la bota derecha. Para quitar la bota Amelia se agachó encima de los pies de Luisita pero una vez liberado el juguetón pie fue directo a restregar la zona intima de Amelia haciéndole dar un saltito.
Luisita miró a Amelia juguetonamente con una ceja levantada. Amelia hizo un gesto de “no, no, no” con la cabeza volviendo a cubrir el cuerpo de Luisita con el suyo pero esta vez en su ascenso dejó que sus pechos rozaran el cuerpo de Luisita. Amelia puso sus ojos a la altura de los de Luisita.
AMELIA: Estamos juguetonas eh?
Amelia volvió a rozar la boca de Luisita con su lengua reposando su trasero en su estómago, esta aprovechó para desabrochar su cinturón y pantalón.
Amelia se incorporó para darse la vuelta. Se inclinó para delante bajando la cremallera de la bota izquierda con la maliciosa idea de poner lo que tapaba el pantalón en la primera línea de visión de la rubia.
Amelia posó sus pies en el suelo tomando una postura de estar agachada, recorrió sus manos por el muslo desnudo de Luisita para alzar la pierna junto con su cuerpo. Amelia dejo “retrasar” la parte inferior de su cuerpo para que pasara por encima de la cara de la rubia quien no dudó en agarrar el pantalón y la goma de la braga haciendo que Amelia los perdiera al levantarse para quitarle la bota.
Una vez de pie Amelia tiró la bota por ahí y levantó los pies del suelo la distancia justa para que Luisita quitara la ropa de sus tobillos.
Amelia pretendía agacharse y volver a levantarse con un movimiento sexy sobre la cara de su amada pero Luisita fue más rápida agarrando los turgentes muslos de Amelia evitando que se levantase, obligándola a “sentarse” en su cara.
Luisita inhaló el dulce aroma de Amelia abriéndose camino con la lengua.
AMELIA: Aaaa
Amelia dejó salir un doloroso gemido cando Luisita dio con su clítoris. Luisita era una experta en la anatomía que tenia entre manos por lo que no tardó demasiado en hacerla gritar de placer retorciéndose encimada de ella. Amelia cayó desplomada sobre la rubia mientras esta relamía los cálidos fluidos de su amada.
Amelia recupero el aliento y se giró rápidamente para besar con urgencia a Luisita. Acarició su mejilla susurrando “guapa” en su oído seguido de pequeños mordisquitos en su lóbulo.
Amelia descendió una vez más por el cuerpo de Luisita. Una vez en sus pies dobló sus rodillas apoyando los pies en el suelo. Sus manos fueron desde las rodillas hasta la goma de la braga pasando delicadamente por los muslos. Luisita levantó levemente el trasero para que Amelia retirase la empapada prenda.
Amelia pasó su lengua por el interior del muslo hasta succionar con deseo el clitoris de la rubia. Luiita puso sus manos en los rizos de Amelia para aumentar la presión y para mantenerla ahí. Amelia no paró de mover su experta lengua ni cuando empezó a penetrar la vagina cada vez con más facilidad, 1 dedo y 2 dedos. Luisita no le dio tiempo a introducir un tercero ya que su nivel de excitación era altísimo y llevaba dos mes esperando este momento. Luisita cerró fuertemente sus rodillas dejando a Amelia atrapada en su palpitante intimidad.
Luisita decidió morder el pantalón de Amelia para acallar sus gritos

ya que era incapaz de controlarse al llegar al éxtasis. Cuando Amelia noto relajarse el cuerpo de Luisita la besó una última vez antes de subir a su cara y quitar el pantalón de su cara para descubrirla con los ojos en blanco intentando recuperarse de semejante explosión. Amelia la besó en cada ojo antes de poner sus ojos enfrente.
AMELIA: Creo que has gritado lo suficiente.
Amelia puso los ojos en su sitio y mirando a Amelia dijo:
LUISITA: Tengo muchos más en la recámara pero déjame recuperar el control de mi cuerpo primero
AMELIA: De acuerdo…
Amelia se tumbó reposando su cabeza en el hombro de la rubia, pero lejos de descansar se dedicó a jugar con su lóbulo dándole pequeños mordisquitos y lametones. Luisita empezó a sonreír.
LUISITA: Como sabes cargarme las pilas cariño.
Luisita volteó a una sonriente Amelia poniéndose ella encima.
LUISITA: Preparada?
AMELIA: Para ti siempre.

Fin del Capítulo 35

Milagro Navideño de 1976Where stories live. Discover now