IN THE LIGHT OF YOUR HALO

TOMA 23 LOS SOLDADOS DE LA MESA REDONDA

TOMA 23 LOS SOLDADOS DE LA MESA REDONDA

La sensación de temor se extendió como un hormigueo a través de mi columna vertebral. No estaba segura de qué sería lo que sucedería una vez Siwon y yo entráramos por esa puerta. Miré por encima del hombro y contemplé con añoranza el pasillo vacío. Todos estaban adentro ya, nosotros dos éramos los únicos que faltaban y ahí estaba yo retrasándonos.

-Todo irá bien-me animó Siwon.

Como tratándose de un hechizo sus palabras hicieron nacer la calma en mí. Su mano tomó la mía con fuerza y le dio un ligero apretón tratando de infundirme valor. Agradecí el gesto con una sonrisa y solté los nervios restantes en un suspiro. No sabía qué sería lo que pasaría después de abrir esa puerta. Era consciente de que se trataba de una reunión de Soldados de Luz, sí, pero no sabía qué era lo que podría resultar de ella. Era irónico, justo en el momento en el que mis preguntas por fin tendrían respuestas yo me encontraba inquieta. Ya no estaba tan segura de querer las respuestas.

-Entremos.

Siwon tomó el pestillo de la puerta con su mano libre y giró de el. La puerta se abrió y una brisa cargada de energía Zeitgeist nos recibió. Me quedé estática admirando los muebles de madera, tan bellamente esculpida y tan antigua, que adornaban el sitio. Cuadros gigantes que representaban escénicas bíblicas yacían colgados en las cuatro paredes. Era como regresar a la edad media. Hermoso y solemne. Era fascinante. El salón al que habíamos ingresado era por mucho el más hermoso sitio en toda la Orden, ahora por fin lo sabía. La decoración sobrepasaba con creces la austeridad del edificio, era como si toda la belleza residiera en ese solo salón.

Siwon tiró de mí e ingresé totalmente a la sala. La tenue iluminación resaltaba las chispas de Zeitgeist que rodeaba a cada una de las figuras sentadas alrededor de la gran mesa redonda que se mostraba imponente en la habitación. Catorce lugares habían alrededor de la mesa, catorce Soldados de Luz eran los dueños de cada sitio, uno para cada usuario de un don de la Luz. Miré con más atención y noté algunos asientos vacíos. No pude evitar sentir un tirón de aprensión, la batalla no había iniciado y ya habíamos sufrido pérdidas.

-¡Hey RiAhn!-Keith me llamó desde el otro lado de la habitación, a su lado Francis me saludó con una sonrisa.

Siwon avanzó a través de la habitación inclinándose ligeramente cada vez que pasábamos a una de las personas que ocupaban los lugares de la mesa, sin saber exactamente por qué comencé a imitarlo después de unos cuantos segundos. Llegamos al sitio que al parecer nos correspondía, justo entre al lado de los gemelos Harcourt.

-Estoy demasiado emocionado-Keith no podía disimular su entusiasmo-, es la primera vez que Francis y yo presenciamos una reunión de los Soldados de Luz-miró de reojo a su hermano y al notar que este se encontraba ocupado hablando con la persona de alado se acercó más a mí-Es genial esta mesa, ¿no?

-Lo es-le respondí quedamente.

-Esta es una de las originales-le dirigí una mirada confusa y él continuó la explicación-. ¿Has escuchado de la mesa redonda del Rey Arturo?-asentí aún más confundida-Bueno, en realidad esa mesa fue construida como una imitación de la mesa en la que comió el Dios Hombre durante la última cena. Se dice que el usuario de Wisdom que vivió en la época del Rey Arturo era amigo de él, que fue él quien le dio la idea de construir una mesa representativa pero con esta peculiar forma, y que al Rey le encantó la idea, tanto que hizo dos, una para él y una se la regaló al usuario de Wisdom.

-¿Estás diciendo que esta mesa fue un regalo del Rey Arturo a un antepasado de InHa?

Mi tono de voz no podía haber reflejado mayor incredulidad. Keith asintió en respuesta y yo miré a Siwon en busca de una confirmación. Él había estado escuchando toda la conversación así que cuando le miré interrogante se limitó a confirmar la historia con una sonrisa de diversión.