Fingir

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Caminamos con tranquilidad por el pasillo hacia la salida, Syrus viene a mi lado. Intento mantenerme a raya, cuando llegamos a la salida Dominick se detiene. Veo el ligero pánico en su semblante, lo tomo del brazo y lo obligo a seguir. Temiendo que los agentes de la paz vean su paro como resistencia y lo arrastren hasta el aerodeslizador.

- No te detengas - hablo, él se tensa intentando caminar. Cuando noto que no está avanzando realmente me detengo - Dominick, necesito que avances.

- No puedo - Syrus nos cruce un poco, fingiendo que él es quien detuvo el paso, niego.

- Si puedes...

- No, Sara. No puedo - intentando contener mi propio pánico, lo tomo de la barbilla y lo obligo a mirarme.

- Si puedes, eres fuerte. Alto y te entrenamos nosotros, vas a dar pelea - el me mira con genuino miedo, yo niego - por favor.

El suspira, me mira unos segundos antes de hablar.

- Tienes el mismo color de ojos que mi hermana - Murmurra, yo me quedo quieta. Lo miro con pesar - se que no podré salir, si alguna vez... mi hermanita llega a ti, que espero que jamas sea así. Por favor, ven por ella y hazla volver a casa.

Contengo las lágrimas, asiento y Syrus lo ayuda a seguir. Camino detrás de ellos, intentando contener mis ganas de vomitar cuando veo a Dominick subir al aerodeslizador.

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Muerdo mis uñas con nervios, Syrus me da un manotazo y yo frunzo el ceño. Ve a una preciosa rubia del uno lanzando un par de lanzas contra los maquis. Estábamos en la zona central, había hecho un pequeño... Coliseo. Miro los espectáculos con asco, la gente aplaude. Syrus dice que hacían este tipo de cosas cuando creían que la audiencia de los juegos bajaría... así podrían excusarse con que todos miraban sus "eventos de entretenimiento"

Yo preferiría estar viendo los juegos, siguiendo a Dominick. Blinda murió en el baño de sangre... me encargue que su cuerpo fuera enviado al distrito, me negaba a que terminara como... un mutó o exhibición. Cada que cierra los ojos puedo ver como partían su cráneo en dos, los del uno nunca... tiene piedad.
Agradecía en lo profundo de mi ser, que hubiera sido rápido. La tomaron desprevenida y no sintió nada... solo se apagaron las luces sin un previo aviso.

Syrus tuvo que contenerme cuando tube un ataque por eso, lance sillas y gorrones contra las pantallas, si... ahora tengo dos agentes de la paz detrás de mi la 24 hora al día por eso.

Me acomoda en mi lugar con malestar, miro un poco alrededor. Para encontrarme con la mirada de Finnick, él suspira y yo aparto la mirada cuando noto como esta levantándose de su asiente y sale de la zona de tribunas. Me pidió... explícitamente que viniera, que viniera y me portara bien. Cuando la pantalla cae en los tridentes de metal nuevo, veo a Finnick aparecer. Jugando con el tridente en sus manos, las chicas gritan como locas y juro que veo a una señora lanzándole flores, si... no podía negar que se veía. Jodidamente atractivo con ese traje azul mar mientras juega con el tridente en su mano, como si el metal no pesara casi 15 kilos. No recordaba que él fuera tan... fuerte.

Lo veo lanzarlo contra los maniquíes, cuando atraviesa a uno sin esfuerzo trajo saliva. Él entonces me dedica una ligera mirada, sonreído brillantemente. Yo siento mi cara calentarse, pero me obligo a mantener mi cara de amargada que es usual.

- deja de mirarlo - habla Syrus, giró mi vista y el me hace una seña - estas roja.

Toco mi mejilla y bajo la vista, dejando de mirar a Finnick. Tomo agua y espero a que termine, luego pasa la chica del cuatro con redes, tomo aire y miro el reloj. Cuando mi turno llega, salgo. Me tomo uno segundos para estirar, mientras los de detrás de escena colocando un chaleco, me muevo dejando que me ayuden. Trueno un poco mis muñecas y miro el reloj, debía ser rápida. Si era rápida menos tiempo me verían, además... Syrus dijo que tomaría mis minutos extra.

LightningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora