SoulSilver: Alma Virtual ©

Capítulo 27: Segunda petición

Pearl llegó a su casa y se encerró en su habitación. Necesitaba pensar. No, necesitaba hablar de esto con alguien, pero sus amigas aún no le hablaban. Tal vez, ésta ocasión serviría para amistarse con ellas. Decidió llamar primero a Marjorie.

—¿Aló?¿Quién habla? —Se escuchó la voz de su amiga en el teléfono.

—¿Marjorie? Soy yo, Pearl...

—Ah... dime qué quieres, Johnson.

—Disculpa por cómo las traté, a ti y a Vannesa, estaba muy molesta y reaccioné mal.

—¿Eso es todo? —dijo Marjorie, tajante.

—Tuve una cita con James...

—¡Estoy en tu casa en 15 minutos!

—¿Qué?

—Me lo tienes que contar en persona, llamaré a Vannesa también.

—¡Espera, Marjorie! —Pero ya la chica había colgado.

Minutos después, las dos chicas llegaron a la casa de Pearl. Y una hora más tarde, ya estaban enteradas de los acontecimientos.

—¿Entonces... él los... ? —Empezó Marjorie.

—A todos... sí. —Completó Pearl.

—Vaya... —dijeron Vannesa y Marjorie al mismo tiempo.

—Fue horrible... y no se qué pensar de él... tiene muchos secretos y cada vez parecen más oscuros.

—¿Te hizo daño?

—No, en realidad, cuando el bus se volcó, me protegió con su cuerpo. No tuve ningún rasguño siquiera.

—¿Y los sujetos tenían armas?

—Sí, ya te dije, eran enormes y disparaban a matar.

—Creo que a mí también me habría dado miedo, pero debes admitir que te mantuvo a salvo, eso es un punto a su favor.

—¡Él asesinó personas! Nada justifica eso.

—Si no lo hubiera hecho, ellos habrían asesinado inocentes, incluso a ti, ¿No lo crees?

—Esos tipos parecían buscarlo a él, tal vez James los conocía, no se en qué líos está metido.

—Tal vez fue impresión tuya, Pili, no tiene sentido que hayan ido tantos sólo por James.

—Es que tú no lo viste Marjorie, la manera en que se movía, era como si estuviera acostumbrado a esos ataques.

—A mí me hubiera gustado ir al cine con él... —dijo Vannesa de repente, ganándose la atención de sus dos amigas —¿Qué? Habría sido lindo que me salvara...

—Es cierto, fue lindo, pero no puedo quitarme esas imágenes de la mente —dijo Pearl.

—Por muy horrible que haya sido, fue necesario a mi parecer, ya que no sólo te salvó a ti, sino también a todas las personas que estaban cerca y pudieron resultar heridas —Vannesa quedó mirando a Pearl fijamente luego de decir eso.

—Puede... puede que tengas razón...

—Entonces, deberías pedirle una disculpa a James.

—Por otro lado —Interrumpió Marjorie —¿Cómo es que ahora son novios?

La chica les explicó, lo mejor que pudo, lo que le había dicho James. Aún así no lo entendieron muy bien. Pasaron las horas entre risas, gritos de alegria, y bromas; y las tres volvían a ser las amigas de siempre.